El presidente de Cantabria, Ignacio Diego, ha afirmado este viernes que el hecho de que sólo se haya presentado una única oferta (la de grupo Ferrovial y la empresa cántabra SIEC) al contrato de colaboración público-privada para acabar las obras de Valdecilla y gestionar durante 20 años 12 servicios no asistenciales, es "prueba" del "alto nivel de exigencia" del pliego de condiciones que rige la licitación.

Diego ha recordado que de las siete empresas que participaron en la fase previa, tres "se quedaron fuera en el primer filtro", y de las cuatro que han participado en la fase de diálogo-competitivo, sólo una ha presentado finalmente una oferta, lo que demuestra -ha dicho- que el procedimiento ha sido "muy exigente para las empresas, muy garantista para los intereses del Gobierno y de los ciudadanos", y en definitiva, "muy selectivo".

Y lo ha atribuido al "alto nivel de exigencia" puesto por la administración en las garantías y parámetros de calidad a cumplir por la adjudicataria en la prestación de los servicios.

El órgano encargado de analizar y evaluar la oferta de Ferrovial-Siec ha sido convocado para el próximo lunes, 21 de octubre, y "cuando se constate que cumple todas las exigencias, se procederá a la adjudicación", ha explicado Diego.

Sin embargo, al ser preguntado por lo que ocurriría si la oferta no cumple el pliego y la licitación queda desierta, Diego ha dicho que "es una buena pregunta que no estoy en disposición de contestar", si bien ha matizado que "seguro que esa eventualidad estará prevista por la administración".

Con posterioridad a estas declaraciones, fuentes de la Consejería de Sanidad han confirmado a Europa Press que si la empresa no cumple los requisitos, el contrato se declarará desierto. No obstante, el departamento de María José Sáez de Buruaga se ha limitado a indicar que, si se da ese supuesto, el Gobierno "tomará una decisión según las alternativas que contempla la legislación".

En sus declaraciones a preguntas de los medios de comunicación, Diego ha vuelto a defender que el contrato de colaboración público privado era "el único procedimiento que permitía acabar las obras en menos de dos años", y ha recordado que las empresas que han participado en el proceso "han ido proponiendo mejoras" en la prestación de los 12 servicios no asistenciales en los que se han englobado "40 contratos dispersos".

Diego ha asegurado que ha sido un procedimiento "riguroso, impecable y muy transparente", que continúa ahora con la previsión de adjudicar el contrato en otoño y comenzar las obras antes de que finalice el año.