Agentes de la Policía Nacional han detenido a una mujer, de nacionalidad hondureña y de 34 años, que regentaba un "piso relax" en el barrio de Garrido de Salamanca, donde presuntamente durante años "se ha lucrado con el ejercicio de la prostitución por mujeres de distintas nacionalidades a las que mantenía encerradas bajo llave y con un absoluto control, mediante la utilización de amenazas y otros métodos coactivos".

Según han informado fuentes policiales a Europa Press, la investigación, denominada 'Operación Jesi', se inició por tener conocimiento de la actividad delictiva por diferentes fuentes, una de ellas a través de un anuncio publicado en la página web 'Mil Anuncios'.

En el transcurso de la investigación, los agentes constataron que presuntamente en la vivienda "no solamente se ejercía la prostitución, sino que las chicas que desarrollaban la actividad eran a su vez víctimas de detención ilegal y tenían que estar permanentemente arregladas y vestidas para los clientes, en un servicio que prestaban durante las 24 horas".

La "madame", de 34 años, alias "Jesi" o "Carolina", mantenía a las mujeres "encerradas en el piso bajo llave", y las amenazaba con hacerles brujería, para lo que contaba con una "gurú" que le hacía los trabajos desde Paraguay, a la que mandaba periódicamente sus honorarios por los presuntos trabajos de magia realizados.

Los encuentros sexuales eran "observados y grabados" mediante una cámara de infrarrojos de visión nocturna, capaz de remitir las imágenes obtenidas a ordenadores o a teléfonos mediante Wifi, con imágenes '3G' o '4G'.

Además, la mujer presuntamente traficaba con sustancias estupefacientes, preferentemente 'speed', que facilitaba a los clientes a un precio de 60 euros el gramo, que podían consumir delante de las trabajadoras sexuales, con lo que "muchas veces con ello la solicitud de más servicios que los pactados inicialmente".