El coordinador local de Unión Progreso y Democracia de Gijón, Armando Fernández Bartolomé, ha demandado al Ayuntamiento de Gijón un "control riguroso" de las actividades contaminantes de las empresas instaladas en su territorio, así como sanciones para las que incumplan los límites establecidos.

Ante la nube roja producida en ArcelorMittal este viernes, a juicio del coordinador de UPyD, la gestión del medio ambiente debe convertirse en una obligación ineludible porque Gijón es una ciudad muy contaminada como demuestran los últimos registros de las estaciones de medición.

Por ello, desde UPyD-Gijón consideran que el Ayuntamiento, y concretamente la alcaldesa como responsable del área medio ambiente, "deben exigir a quien corresponda un control riguroso y la imposición de sanciones a aquellas empresas que no respeten los índices mínimos". Pero dichas medidas correctoras no bastan para paliar por sí solas los efectos negativos de la actividad industrial, porque, según la formación, "se deben articular otras medidas tales como incentivos positivos para la empresas que inviertan en la protección de su entorno y comprometidas con la responsabilidad social corporativa".

Asimismo, se debe potenciar "la red de vigilancia de la contaminación atmosférica y facilitar el acceso a sus datos por internet en tiempo real a toda la ciudadanía".

Bartolomé recuerda además que "el tema de la contaminación es antiguo y este suceso pone de manifiesto que han fallado, una vez más, los controles y no se ha escuchado a los vecinos. La alcaldesa, que además dirige personalmente el área de medio ambiente, debe dar *una explicación a los gijoneses y velar porque estos sucesos no queden impunes".

No se trata de un hecho aislado: desde hace mucho tiempo las parroquias del concejo más cercanas a Arcelor y la zona oeste de la ciudad llevan sufriendo las consecuencias de la contaminación provocada por el funcionamiento de esta industria.