El ministro de Interior y dirigente del PP catalán, Jorge Fernández Díaz, ha asegurado este lunes que él está de acuerdo con el principio de ordinalidad en la financiación autonómica, aunque ha dejado claro que no puede llevarse al extremo y que quien más tiene debe ser solidario.

"Yo estoy de acuerdo con el principio de ordinalidad", ha dicho en una entrevista en Antena 3 recogida por Europa Press. Fernández Díaz ha explicado que la solidaridad interterritorial es "un principio constitucional", incluso "forma parte de la solidaridad humana", pero considera "razonable" que la solidaridad tenga "un límite y unas condiciones", como cumplir el principio de ordinalidad o "ser finalista".

Así, ha precisado en qué consiste el principio: "Si Cataluña en renta per cápita es la tercera de España, que yo por ser contribuyente neto a la solidaridad interterritorial no baje a ser cuarto o quinto o sexto".

No obstante, ha subrayado también que quien más tiene debe ser solidario con el resto, y ha puesto como ejemplo que sin salir de la ciudad de Barcelona los barrios más ricos —sus residentes— pagan más impuestos que los más modestos. Por eso, ha afirmado que no se pueden llevar las cosas "al extremo" sino que ha pedido discutirlas con "sensatez y responsabilidad".

El actual modelo fue promovido por el tripartito catalán

También ha recordado que el modelo de financiación autonómica actual lo promovió en su día el Gobierno tripartito catalán formado por PSC, ERC e ICV y lo tildaron de "el mejor de la historia de Cataluña", aunque ahora "ERC e ICV están en otra cosa.

En todo caso, Fernández Díaz ha pedido abandonar los debates "nominalistas" e "ir a los conceptos". En este sentido, ha remarcado que cuando se habla de "derecho a decidir" eso "encubre el derecho de autodeterminación" que es un concepto que la ONU tiene tipificado para otro tipo de territorios, que es "socia fundadora de España, forma parte de España y es España desde hace siglos".

Para resolver el desafío independentista catalán, ha subrayado que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dejado claro que acepta el diálogo "hasta el infinito", pero que el diálogo en un Estado de Derecho debe hacerse conforme a las reglas, es decir, conforme a la Constitución.

"Dentro de la Constitución cabe todo tipo de diálogo, y fuera de la Constitución, quien quiera reformarla, que es legítimo, tiene que decir qué reforma de la Constitución quiere y para qué la quiere", ha avisado a todos los partidos.

Y es que a su juicio ahora mismo no hay un "consenso mínimamente establecido" para abordar una reforma, porque los socialistas quieren un Estado federal, IU una república confederal y UDC también habla de confederación; mientras el presidente de la Generalitat, Artur Mas, y ERC quieren "la independencia" y UPyD "va en una línea más centralista".

En este punto, ha recordado que la Constitución actual se aprobó con el consenso "de todo el arco parlamentario y social" y que Cataluña fue una de las comunidades donde el apoyo a la Carta Magna fue mayor. También ha pedido a los socialistas que dejen el "debate nominalista" y expliquen su propuesta federal, porque en la práctica "el Estado autonómico español es más descentralizado territorial, política y económicamente que muchos estados federales" y en "en la práctica" la doctrina lo considera federalismo cooperativo.