Esto es lo que debió pensar el joven senegalés que solicitó la ayuda de un compatriota para que se examinara por él. La Guardia Civil, sin embargo, descubrió el engaño y detuvo el lunes al suplantado. Los agentes que vigilaban ese día las pruebas pidieron el carné de identidad a varios aspirantes para descubrir que uno de ellos, aunque «se parecía mucho al de la foto», afirman los agentes, no era la persona que decía. Finalmente, el ahora detenido reconoció que estaba haciéndole un favor a su primo, analfabeto. La Guardia Civil investiga si el detenido cobró por este tipo de ayuda y si ya había hecho otros favores antes.