Un grupo de profesionales, creadores de un equipo multidisciplinar para ofrecer una atención integral a los niños con Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), ha advertido hoy de que este trastorno está "sobrediagnosticado" y "carece de criterio antes de los seis años".

AtienDAH es un protocolo de actuación diseñado por un equipo de pediatras, psicólogos, psiquiatras, neuropsicólogos, neurofisiólogos y psicopedagogos para evaluar y diseñar el tratamiento e intervenir de forma global.

En rueda de prensa, la psicóloga Pilar Yangüela ha explicado que se persigue que las familias "no tengan que peregrinar" de un especialista a otro. Como principal novedad en La Rioja, además de esta oferta conjunta, AtiendeDAH utiliza indicadores neurofisiólogos con las nuevas tecnologías.

El pediatra Francisco Jiménez ha explicado que el TDAH hace que los niños presenten hiperactividad e impulsividad; son niños excesivamente inquietos, "incapaces de estar sentados" y con una marcada agitación motriz.

Estos síntomas, que en menor grado son comunes en la mayoría de los niños, alcanzan en este caso una intensidad suficiente para alterar la vida de un niño.

Ha calculado que entre mil y 3.000 niños en La Rioja, de entre seis y catorce años están afectados, y es que antes de esta edad atribuir a un niño TDAH "carece de criterio". Así, los indicadores de un posible TDAH, como interrumpir, dejar las tareas sin acabar o no prestar atención se pueden observar en todos los niños más pequeños.

Los profesionales también han respondido a la pregunta, por parte de la prensa, de que, diversos medios de comunicación se hicieran eco de las palabras del psiquiatra a quien se le atribuye el descubrimiento del trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), Leon Eisenberg, quien meses antes de morir confesaba que el TDAH "es un trastorno ficticio".

Desde los años treinta, la medicina intenta explicar este trastorno. En aquella época los médicos diagnosticaban a los niños nerviosos síndrome posencefálico. Eisenberg, en los sesenta, retomó la investigación y le atribuyó causas genéticas. Matizando sus palabras al morir, el psiquiatra instó a sus compañeros a buscar las razones psicosociales que llevan a estas consultas.

Jiménez ha mostrado su "dolor" cuando se dice que este trastorno es inventado, dada su experiencia al ver a menores afectados por el mismo. Sí ha reconocido que está "sobrediagnosticado"; una palabra que también ha usado Yangüela quien ha especificado que "no todo niño movido" tiene TDAH.

Precisamente por esto, el equipo ofrece una "atención global" que, incluso, abarca al entorno familiar y escolar del menor. "Un niño que se mueve mucho puede tener ansiedad, trastorno de atención o, incluso, una depresión". Por eso, el tratamiento es pedriátrico, sicológico y, también, neorológico.

Así, tal y como ha explicado la neurofisióloga Yolanda González González se usan hondas con electrodos, una técnica "no invasiva", ha asegurado, para detectar la actividad específica de este trastorno en el cerebro.

El tratamiento comienza siendo sicológico y psicosocial y, en caso necesario, se administran fármacos. Otra novedad, ha especificado González, es que a los nueve meses se detectan, ya, indicadores de mejoría. El grupo ofrece información en su página web www.atiendah.com.