Los dos jóvenes de 17 años entraron anoche en el domicilio de la pequeña localidad de Boizenburg y mataron con un cuchillo a la mujer de 41 años y su esposo de 46.

Aunque de momento se desconocen los motivos que les llevaron a protagonizar semejante baño de sangre, se cree que fueron sorprendidos mientras intentaban robar en la casa.

Entrega negociada

El hijo de la pareja, de 16 años, logró huir y encerrarse en su habitación, desde donde avisó a la policía.

Cuando ésta llegó, los agresores tomaron a una joven como rehén, aunque la fiscalía no quiso dar más detalles acerca de la identidad de la misma.

Los dos agresores intentaron huir con el automóvil de la familia, y para ello atravesaron el portón de entrada a la casa y la barrera levantada por la policía, para detenerse escasos metros después.

Después de más de una hora de negociaciones, la policía logró convencer a la pareja para que soltaran a la joven y se entregaran. Ambos agresores se encuentran bajo arresto preventivo a la espera de que la fiscalía dicte orden de prisión.