El secretario general del sindicato CTA, Francisco Moro, en representación del comité de empresa de Laboratorios Pérez Giménez, con sede en Almodóvar del Río (Córdoba), ha informado este viernes de que hay un grupo comprador, no inversor, que se ha dirigido a la administración concursal y al juzgado para pedir la cuenta bancaria en la que tiene que depositar el millón de euros, requisito que se exige para poder competir en la adquisición de dicha farmacéutica, en concurso de acreedores, y en la que prevé aumentar la plantilla en unos 30 trabajadores en un año.

En declaraciones a los periodistas, el sindicalista ha comentado que dicho grupo internacional, del sector farmacéutico y nutrición y que cree que se presentará en próximos días, asumiría las deudas de Laboratorios Pérez Giménez con los trabajadores, de más de 1,5 millones de euros, y "estaría dispuesto a aportar una importante cantidad de dinero para comprar materia prima e invertir", al tiempo que "solicitan la carencia de dos años en cuanto a la deuda respecto a los acreedores, fijada por el juzgado, y asumirían la deuda que se establece con los acreedores, contemplando la quita", además de estar dispuestos a asumir unos 180 puestos de trabajo en el periodo de un año, teniendo en cuenta que ahora cuenta con unos 155 empleados, ha precisado.

Igualmente, Moro, quien espera abrir un periodo de negociación con el comprador, indica que "un importante laboratorio español, distinto a este grupo, se ha querido poner en contacto con la Agencia IDEA", aunque sin que hayan trascendido más detalles. No obstante, desde CTA solicitan del juzgado y los administradores concursales que "haya diligencia en la venta de la compañía, porque hasta ahora por parte de la administración concursal no se ha visto", ha advertido, para precisar que en la actualidad se desconoce el número de ofertas, aunque estima que son unas cuatro.

Entretanto, advierte de la situación de los trabajadores, a los que "se les deben las nóminas desde mediados de septiembre de 2012 y no cobran el desempleo", de ahí que reivindiquen que "se apresuren lo máximo posible en la venta de la compañía para que el sufrimiento de los empleados no continúe". Precisamente, apunta que el lunes se retoma el trabajo con unas 30 personas.

En definitiva, el sindicato CTA espera que "se abra la competencia por la compra de los laboratorios y que haya más licitadores", además de "los plazos se acorten lo máximo posible, porque no es normal que un concurso de acreedores dure como este, desde noviembre de 2011", critica Moro, quien subraya que "la situación de agonía que sufren los empleados no es normal", por lo que espera que "haya una salida positiva" a la situación.

Por otra parte, insiste en que desde la sección sindical se piensa que "hay un partido político que ha tenido que ver bastante en el desarrollo de los laboratorios, tanto la Agencia IDEA como determinados exresponsables políticos de ese partido", que, a su juicio, "han intervenido directamente, incluso en la dirección de la compañía, como exsenadores". A tal efecto, recuerda que "hay una pieza separada en el juzgado presentada por los propios administradores concursales, de la que no han trascendido datos y se piden responsabilidades económicas a numerosas personas".