La localidad jiennense de Siles acoge este fin de semana el XVI Concurso de Hacheros Segureños, que un año más tratará de reivindicar las virtudes de un oficio que tradicionalmente ha formado parte del modo de vida de los habitantes de la Sierra de Segura, ahora en decadencia, aunque con un gran interés etnológico.

Durante las mañanas de los próximos sábado y domingo, a partir de las 10,00 horas y hasta las 14,00 horas, aproximadamente, se reunirán en los alrededores del campo de tiro del municipio muchos de quienes todavía viven del aprovechamiento forestal en esta comarca serrana. Los participantes, hasta un máximo de 15, recibirán una paletilla y una botella de vino por su esfuerzo. Al inicio de los concursos, según ha detallado este viernes en una nota la organización, se pondrá a disposición de los participantes 25 pinos que serán sorteados.

Llegará entonces el momento de medir la habilidad y fuerza de los hacheros en disciplinas como los concursos de pela de pinos, corte de pinos con motosierra o corte con tronceador. Este último estilo, que se practica por parejas, es el modo de cortar tradicional, utilizado desde hace siglos, antes de la aparición de las maquinarias. Habrá, además, una exhibición de ajorro de pinos con mulos, donde se podrá admirar la habilidad de los madereros a la hora de conducir a sus bestias.

Durante los pruebas se premiará el tiempo en cortar los árboles, la menor altura de la zona de corte —cuanto más baja más dificultad y, por lo tanto, más puntos—, la limpieza del desrame, la habilidad de los hacheros a la hora de hacer caer el tronco en un punto señalado por un banderín o la limpieza en la pela de las cortezas. Asimismo, se penalizarán infracciones como el desgaje en el tocón o en el fuste, el engarbe —si un pino cae sobre otro— o cualquier retoque en los cortes.

De este modo, un año más el certamen pretende "que las tradiciones no se pierdan, intentando potenciar y recuperar la actividad económica forestal, un modo de vida tradicional de la Sierra de Segura", tal y como destacó en su presentación el pasado día 5 el alcalde de Siles, Francisco Javier Bermúdez.

Junto a ello, la organización ha aludido a la "espectacularidad de estas pruebas desde el punto de vista visual" como "un original aliciente para el turismo rural y el público en general", por lo que ha animado a vecinos y visitantes a acercarse para conocer esta actividad ahora en decadencia, aunque en su momento fundamental en la vida de muchos segureños.

Y es que el concurso remite a los tiempos en los que la Sierra de Segura era un concejo de pueblos que vivía prácticamente de forma independiente, gracias sobre todo a la autonomía económica que propiciaba la explotación sostenible de sus montes. Además de por sus cortadores de madera, la Sierra de Segura era conocida en el pasado por sus pineros, que conducían grandes troncos desde la cabecera de los dos grandes ríos que nacen en esta comarca, el Guadalquivir y el Segura, hasta los puertos de Sevilla o Cartagena.