Felipe López, presidente del gremio de minoristas de pescado del mercado central de abastos hispalense, Mercasevilla, ha lamentado este jueves el expediente de regulación de empleo (ERE) que se cierne sobre la plantilla con 129 despidos y la externalización de 39 puestos de empleo. En declaraciones a Europa Press, López ha mostrado su solidaridad con los trabajadores afectados porque son quienes "pagan" las consecuencias de un conflicto en el que todas las partes "han tensado demasiado la cuerda".

Mientras la sociedad gestora del mercado central, participada mayoritariamente por el Ayuntamiento hispalense, ha notificado ya las cartas colectivas de despido con un expediente de regulación de empleo (ERE) para 129 trabajadores y la externalización de otros 39 puestos de trabajo, lo que reduce drásticamente la plantilla de la empresa, López ha manifestado que la madrugada de este jueves ha sido "muy triste" en la lonja de pescado. "Lo hemos pasado muy mal. Hemos visto a trabajadores de toda la vida, padres de familia, llorando porque sabían que se trata de su última jornada de trabajo".

Las cuentas de mercasevilla

Y es que mientras los despidos serán efectivos el próximo lunes día 12 de agosto, la plantilla de Mercasevilla está convocada a una huelga de 48 horas que comienza a las 23,00 horas de este mismo jueves para cubrir las últimas jornadas previas a la consumación de los despidos. López, además, ha señalado las "incongruencias" de las que deriva este expediente de regulación de empleo en el que la empresa, entre otras cosas, alega la previsión de cerrar el año con pérdidas por valor de 1.469.290 euros. Mercasevilla, cabe recordarlo, cerró 2012 con pérdidas de 552.728 euros, 2011 con beneficios pero por la reversión del aprovisionamiento del ERE acordado en 2007 y 2010 con pérdidas de 381.560 euros.

Mientras en el seno de las instituciones europeas reside un expediente por la supuesta situación de monopolio en la que incurriría Mercasevilla al prestar con su plantilla los servicios de carga y facturación del género en la lonja de pescado, con la correspondiente imposición de un gravamen a los empresarios mayoristas, López señala que la empresa simplemente "se ha circunscrito a lo que recomendó la Unión Europea y se ha lavado las manos como Pilatos".

La unión europea

Para el Gobierno local del PP, la liberalización de la lonja responde así a las exigencias de las regulaciones europeas, toda vez que los trabajadores defienden que la Unión Europea no ha emitido aún ningún dictamen concluyente o definitivo sobre este conflicto. "Cada una de las partes ha tensado demasiado la cuerda y al final lo pagan los trabajadores", ha lamentado López, quien cree que todo podría haber sido resuelto "de otra manera" si la negociación hubiese sido diferente". "Si nos hubieran preguntado a nosotros, podríamos haber mediado mejor que cualquier político", ha dicho.

Finalmente, ha manifestado que pese a todo, aunque sean despedidos los trabajadores de la lonja de pescado, la carga de trabajo sigue ahí. "Ese hueco y esas plazas tienen que ser cubiertas, porque para los trabajos de la lonja hacen falta unas 70 personas". En esta situación en concreto, a su juicio, "es donde ha fallado la negociación".