Un hombre ha sido detenido este miércoles en Bristol (oeste de Inglaterra) en relación a una serie de amenazas vertidas contra varias mujeres a través de la red social Twitter, informó la Policía británica. Es el tercer detenido por amenazas de muerte y de agresiones sexuales contra varias mujeres que lograron convencer al Banco de Inglaterra de que dedicara al menos un billete oficial a una mujer.

El hombre, de 32 años pero cuya identidad no ha sido facilitada, fue arrestado por amenazas de violación a la diputada laborista Stella Creasy y a la defensora de causas feministas Caroline Criado-Perez, indicó Scotland Yard. El detenido será interrogado en una comisaría local bajo la sospecha de haber cometido un delito en virtud de la llamada Ley de Protección y Acoso, añadieron las fuerzas del orden.

Este caso obligó hace unos días al responsable de Twitter en el Reino Unido, Tom Wang, a pedir disculpas a las  mujeres que han recibido las amenazas, que calificó de "inaceptables". La red social ha adoptado nuevas reglas para controlar el lenguaje ofensivo. Twitter ha anunciado la incorporación de una tecla para el reporte de insultos y la actualización de sus normas a fin de aclarar que no se tolerarán comportamientos ofensivos.

Además de Creasy y Criado-Perez, las columnistas Hadley Freeman, del diario The Guardian; Grace Dent, de The Independent, y Catherine Mayer, de la revista Time, revelaron recientemente que habían recibido amenazas de bomba por parte del mismo usuario anónimo de Twitter.

Criado-Pérez es una feminista impulsora de una campaña, apoyada por más de 35.000 firmas, contra la retirada de la efigie de Elizabeth Fry de los billetes de 5 libras esterlinas en favor del ex primer ministro Winston Churchill.

La activista denunciaba que los billetes británicos quedarían sin representación femenina (excepto la de la reina Isabel II), si bien el Banco de Inglaterra anunció hace días que a partir de 2017 la escritora Jane Austen sustituirá al científico Charles Darwin en los de 10 libras.

El éxito de su campaña por la equidad se vio empañado por un alud de insultos y amenazas de 'trolls' en las redes sociales, sobre todo Twitter.