Las agencias recargan hasta 15 euros el billete de tren

  • Un tercio de los pasajes se venden mediante intermediarios.
  • Renfe rebajó las comisiones desde principio de año.
  • Los consumidores lo ven "excesivo".

Las agencias de viaje de Catalunya cobran un suplemento de hasta 7,5 euros por trayecto por emitir billetes de larga distancia de Renfe.

Lo hacen en concepto de «"gastos de gestión", pero en realidad es una comisión que ha encarecido el precio final que paga el consumidor.

Con el cambio de año, la compensación del "7% u 8%" que las agencias recibían de la compañía ferroviaria por vender los pasajes se ha reducido "hasta el 0,5%", según el presidente de la Associació d’Agències de Viatge (ACAV), Francisco Carnerero.

"Renfe, único proveedor de servicios ferroviarios, decidió retirar las comisiones. Es una decisión unilateral", en vigor desde el 1 de enero, lamenta Carnerero, que se queja de la "posición dominante" de Renfe.

Un 37% del negocio

No ha habido una "recomendación" a las agencias para que dejen de vender billetes de Renfe. "Es una decisión de cada una", indica. Según fuentes de la compañía ferroviaria, un 37% de sus ventas se realizan a través de estos intermediarios, un 6% por Internet y el 57% restante, por ventanilla.

La comisión que cargan las agencias es variable. La prueba la ha hecho 20 minutos en numerosas agencias para trayectos entre Barcelona y Madrid o Valencia. La mayoría cobra un fijo: entre 3 euros y 15 euros, aunque lo más común es que cobren entre 4 y 6 euros. Es menos frecuente, en cambio, que las agencias exijan un porcentaje (del 4%) sobre el precio del billete.

Sobreprecio legal

La Generalitat asegura que este sobreprecio es legal, siempre y cuando se informe de la comisión al viajero.

El presidente de la Unió de Consumidors, Manel Ruiz, cree que el encarecimiento que el usuario puede llegar a soportar en caso de trayectos cortos (Barcelona-Lleida o Barcelona-Zaragoza) puede ser "excesivo".

Separación de costes en el precio

Renfe estudia separar los conceptos del precio de sus billetes, igual que hacen algunas compañías aéreas. Se trata de "diferenciar los costes de transporte y los de emisión", explicó una fuente de la empresa.

Este último concepto haría variable el coste final del billete, según se adquiera por Internet, ventanilla o agencia. La medida se podría aprobar el próximo jueves en el consejo de administración de Renfe. La compañía también podría revisar al alza las tarifas para largo recorrido. En 2007, Cercanías y Regionales se encarecieron un 3,7%.

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