El economista Juan Velarde ha afirmado este jueves que "había que hacer cursos este verano en La Granda" y que "he apostado por este riesgo porque tengo un lema, el de la infantería de Cromwell: ni un paso atrás". Ha realizado estas declaraciones en Avilés durante la presentación de unos cursos de verano que él mismo dirige y que se celebrarán en el palacete de Arcelor-Mittal a partir del 29 de julio.

Se organizan en el mismo lugar en el que durante 34 años los ha venido organización la Fundación Asturiana de Estudios Hispánicos y cuenta con buena parte de los ponentes que eran habituales en las conferencias que gestionaba la entidad que preside Teodoro López-Cuesta y que este año, por cuestiones económicas, decidió renunciar a ellos.

Velarde ha afirmado que sus cursos "nada tienen que ver con la Fundación Asturiana de Estudios Hispánicos, que ha decidido desaparecer". Ha insistido en que "debe continuar la actividad intelectual, que ponemos a disposición de Asturias y los visitantes que quieran venir".

La Fundación Asturiana de Estudios Hispánicos emitió este martes un comunicado en el que planteaba la posibilidad de volver organizar los cursos el próximo año, la que sería su 35ª edición. Velarde no ha querido hablar de qué ocurriría si dos propuestas similares ocurriesen en el mismo lugar en la misma época.

"Yo asumí los de este año. Del futuro hablo poco. Veremos qué ocurre", ha dicho y ha apuntado que los cursos en tras los cursos de La Granda que él dirige "entidad que jurídicamente tiene existencia".

Los cursos comenzarán el próximo 29 de julio con una serie de conferencias bajo el título 'Reformas para el crecimiento económico, la generación de empleo y el esfuerzo de la sostenibilidad del sistema de pensiones". Será inaugurado por la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y subvencionado por su ministerio.

Conferencias sobre Jovellanos, financiadas por el Ayuntamiento de Gijón, y otras sobre el general Prim y nuevas tendencias en la medicina completan la programación. Estos dos últimos serán financiados con las aportaciones de Iberdrola y la Fundación Santander. Velarde agradeció a estas instituciones su colaboración, así como a Arcelor-Mittal y la Universidad de Oviedo.