La Audiencia Provincial ha condenado a dos años y tres meses de prisión a un hombre que se coló en el domicilio que antes compartía con su hijo y su esposa en Torrelavega y provocó un incendio pocas horas después de amenazarle con hacerlo y de que le ampliaran la orden de alejamiento que ya tenía de ella.

El hombre, con iniciales A.H.A., ha sido condenado a un año de prisión por un delito de quebrantamiento de condena y a otro año y tres meses por otro de daños por incendio, confirmando así la penas de cárcel impuestas por el juzgado de instancia y rechazando el recurso interpuesto por el condenado.

Según se explica en la sentencia, el hombre llamó a su esposa por teléfono hasta en tres ocasiones —llegando a hablar con ella— horas después de enterarse de que en marzo de 2010 se ampliara la orden de alejamiento y la prohibición de comunicarse con ella durante la instrucción de una causa que estaba en los juzgados de Torrelavega.

En su conversación, el hombre amenazó a la mujer con quemar el domicilio familiar en la Plaza Granja Poch de Torrelavega, cuyo uso y disfrute había sido concedido por auto judicial a la esposa y los hijos.

A las pocas horas, el hombre aprovechó que no había nadie en casa para entrar en el domicilio y prender fuego en el interior de un armario ropero del dormitorio principal, obligando a intervenir a varias dotaciones de Bomberos y causando desperfectos en la vivienda y enseres tasados en 29.400 euros.

Axa, aseguradora con la que el matrimonio tenía contratada la póliza de la casa, reparó parte de los desperfectos, abonado 18.755 euros.

En la sentencia del Audiencia, el juez considera que hay "pruebas indiciarias suficientes" —cita hasta siete— que, a su juicio, permiten "desvirtuar" el derecho de presunción de inocencia de A.H.A. y condenarle.

Entre otros "indicios", señala la advertencia realizada por el hombre horas antes, el hecho de que tuviera llaves de la casa, lo que concuerda con el hecho de que la cerradura no estaba forzada, o, incluso, que minutos antes de declararse el incendió pidió un mechero en un bar.

La sentencia del juzgado de instancia también fue recurrida por la esposa del condenado, que se solicitaba que se incrementase la indemnización que su marido debía pagarle.

En ella, se condenaba a A.H.A. a indemnizar a su esposa con 3.358 euros y a AXA con los 18.755 euros abonados.

En su resolución, la Sección Tercera de la Audiencia Provincial incrementa en 4.700 euros la indemnización a la mujer por los desperfectos en los muebles de la habitación que le había regalado su padre.

Antes de estos sucesos, en diciembre de 2009 A.H.A. fue condenado a un año y tres meses de cárcel por un delito de alzamiento de bienes, si bien se le había concedido la suspensión condicional de la pena de prisión desde febrero de 2010.