El propietario del establecimiento denunció ante la Policía Nacional haber sufrido un robo en su localidad, del que le habían sustraído diverso material eléctrico, además de causarle numerosos daños, que había valorado en total en 4.000 euros.
En la investigación llevada a cabo, los agentes policiales recabaron datos del resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y comprobaron que agentes del Cuerpo de la Guardia Civil habían intervenido entre 20 y 30 kilogramos de cableado de electricidad a dos individuos en la zona citada.
Dichos objetos fueron reconocidos por la víctima como propios, por lo que se le entregaron en calidad de depósito, informa la Policía Nacional en nota de prensa.
Así, se procedió a la detención de las dos personas a las que le fueron intervenido este material, ser dos varones de 20 y 23 años de edad, con antecedentes, quienes fueron trasladados a dependencias policiales para tramitar el correspondiente atestado.
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