Un 29,4% de los municipios de la provincia de Lleida presenta algún tipo de disfunción territorial de las recogidas en el decreto que regula la constitución y demarcación territorial de Catalunya, según la tesis de la geógrafa de la Universitat de Lleida (UdL) Montserrat Guerrero.

Guerrero ha detectado la existencia de 182 disfunciones repartidas en 68 municipios de los 231 que hay en total.

De éstas, 40 son enclaves, lo que convierte Lleida en la segunda provincia de todo España tras Valencia con más territorios situados dentro de otro con características administrativas diferentes.

Guerrero afirma que un volumen importante de ciudadanos se ve afectado por estas situaciones que les "impiden recibir los mismos servicios básicos que el resto".

Las administraciones locales también son parte afectada, puesto que sufren sobrecostes económicos y a menudo desacuerdos entre ayuntamientos vecinos a la hora de suministrar servicios básicos, como el alumbrado, el agua, las comunicaciones y el alcantarillado en núcleos ubicados en enclaves o en límites de termino, según un comunicado de la UDL sobre la tesis.

Esta circunstancia según la autora se da reiteradamente en el Pirineu, en municipios como Conca de Dalt y Montferrer i Castellbò que, además, soportan más costes de mantenimiento para tener la población diseminada o con más de un núcleo repartido por un gran territorio

La tesis de Montserrat Guerrero, dirigida por el profesor de Geografía de la UdL Jesús Burgueño, también subraya las cabezas municiaples que tienen su ayuntamiento fuera de su término municipal como Castellar de la Ribera, Odèn y Riner.

En su relación de municipios con disfunciones figuran las urbanizaciones partidas por dos términos y los núcleos que están aislados de su consistorio por accidentes geográficos.

La autora ha identificado 33 en que para acceder en el ayuntamiento se tiene que recorrer un trayecto más largo por la existencia de accidentes geográficos como los ríos.

"A menudo se trata de municipios de montaña que en la última etapa franquista se vieron forzados a fusionarse con otros", según la autora para quien aquellas uniones comporta municipios de gran superficie sin cohesión interna.

"El caso paradigmático es, sin duda, Tremp con 4 enclaves, 18 núcleos de población y un total de 22 disfunciones territoriales", destaca.

La UdL destaca en su comunicado que esta tesis se enmarca en un momento de crisis económica que hace peligrar el mantenimiento de los servicios básicos actuales y aplaza inversiones en infraestructuras.

El director de la tesis remarca que "las nuevas leyes de régimen local y 'vegueries' se podrían traducir en un nuevo modelo de organización territorial de Catalunya en los próximos años", según Guerrero.

El profesor apunta a que la Generalitat está llevando a cabo la actualización de los límites municipales de todo el territorio, pero lamenta que "desgraciadamente desaprovecha la ocasión para mirar de solucionar las disfunciones existentes tipificadas por el Decreto 244/2007".

Montserrat Guerrero defiende la legitimidad de conocer el mapa municipal, "con sus incoherencias", y mirar de reorganizarlo priorizando la eficacia de los recursos y el bienestar de los ciudadanos.

La autora sustenta que la corrección de las disfunciones puede contribuir a reducir los problemas administrativos y de recursos económicos que sufren especialmente los ayuntamientos y vecinos ubicados en territorios con una disfunción.