El Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB) ha denunciado que agentes de la localidad valenciana de Alaquàs tienen que llevar, por orden del Intendente, un arnés de color amarillo reflectante, que no está recogido dentro del Decreto 114/2005, regulador del sistema de homogeneización y homologación de la uniformidad de la Policía Local de la Comunitat.

El sindicato ha afirmado en un comunicado que se trata de una "rocambolesca" uniformidad, que da "muy mala imagen" del cuerpo policial, al mismo tiempo que podría poner en peligro la integridad física de los agentes.

Los agentes de Alaquàs —ha agregado el sindicato— tienen que llevar este arnés de forma ininterrumpida por las mañanas, desde las 6 hasta las 9.10 horas, y por las tardes, de 19 hasta las 22 horas. También tienen que colocárselo cuando realicen algún servicio de regulación del tráfico fuera de las citadas franjas horarias.

Este último aspecto, según ha dicho la entidad, también contradice el anexo I del Decreto, que establece como elementos especiales de regulación del tráfico manguitos, chaleco, polainas y/o cinturón, y señala que solo se utilizarán en circunstancias especiales como oscuridad-noche, niebla o lluvia.

Por otro lado, estos arnés, al que tener que ajustarse en su parte de inferior con velcro, esta dañando la prenda superior del uniforme, ya que al estar confeccionado con licra, cada vez que el velcro toca ese tejido, "se deshilacha", por lo que los agentes "se ven obligados a trabajar con los polos de la uniformidad deteriorados".

Ante esta situación, SPPLB está estudiando acciones legales contra la imposición de la prenda, "pues a parte de ir totalmente en contra de las directrices marcadas por el Decreto 114/2005, supone también un riesgo para la integridad de los agentes que la utilizan, pues se ha comprobado que en un momento dado si alguna persona agresiva quiere arremeter contra el Policía que lleva puesto los arnés, es muy fácil llevarlo al suelo al tirar bruscamente de sus extremos".