Un coche convertido en escultura pop, designado icono oficial del 90º aniversario de Le Mans

  • El escultor francés Fernando Costa fabricó para el Morgan-Nissan Art Car una carrocería artesanal hecha con señales y carteles de tráfico.
  • La obra rinde homenaje a los coches de carreras y alude a la seguridad vial.
  • La pieza escultórica de Costa, gran admirador de la Fórmula 1, será el emblema de  la conmemoración de los 90 años de la carrera de resistencia.
El Morgan-Nissan Art Car, el coche transformado por Fernando Costa, que creó la carrocería de modo artesanal, con señales y carteles de tráfico
El Morgan-Nissan Art Car, el coche transformado por Fernando Costa, que creó la carrocería de modo artesanal, con señales y carteles de tráfico
JM Anglès
El Morgan-Nissan Art Car, el coche transformado por Fernando Costa, que creó la carrocería de modo artesanal, con señales y carteles de tráfico

Con una paleta de colores que resultan extrañamente familiares, en las creaciones del escultor francés Fernando Costa abundan el rojo, el amarillo y el verde, las siluetas de peatones masculinos con sombrero vistos de perfil, iconos de aviones recortados sobre un fondo blanco, frases cortas con mensajes de prohibición o restricción... El artista compone collage con señales y carteles de tráfico y construye con ellos un original lenguaje caótico y pop que a la vez se presenta como cotidiano y mundial.

Con motivo del 90º aniversario de las 24 horas de Le Mans, la carrera de resistencia automovilística que se celebra cada junio en el circuito de La Sarthe, el equipo OAK Racing ha acudido a Costa para que transforme un vehículo de carreras en una pieza artística. El resultado es el Morgan-Nissan Art Car, un coche con una carrocería artesanal hecha a partir de señales y carteles de tráfico.

600 horas de trabajo

El historial de Costa como creador de arte a partir de señales de tráfico atrajo Jacques Nicolet, dueño y piloto de OAK, que fue a la inauguración de una de las exposiciones del escultor  en una galería de París. Admirador de las las 24 horas de Le Mans (ha acudido a la competición como espectador una veintena de veces), el artista confesó sentirse abrumado por el reto.

Tras 600 horas de trabajo en su taller, soldando y moldeando cada pieza a la medida del automóvil, la obra exhibe un diseño extravagante pero lógico, que rinde homenaje a los coches de carreras y también a la seguridad vial que implica la conducción de cualquier vehículo. La pieza ha sido elegido por los organizadores de Le Mans —el  Automobile Club de l'Ouest, (ACO)— como el icono oficial de la conmemoración del aniversario del rally, que celebrará su 90ª edición los días 22 y 23 de junio.

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