La secretaria general de UGT en Cantabria, María Jesús Cedrún Gutiérrez, ha sido reelegida este sábado en el cargo para su cuarto mandato consecutivo por un 91% de votos favorables (173 sufragios a favor y 17 en blanco de un total de 190) en el duodécimo congreso regional del sindicato.

Cedrún, maestra de profesión y adscrita a la Escuela de Adultos de Torrelavega, liderará una nueva Ejecutiva regional integrada por 13 sindicalista con sólo dos caras nuevas en relación al anterior equipo directivo, las nuevas responsables comarcales de Besaya y Campoo, Cecilia Gutiérrez y Rosa María Alonso.

Alfonso Gil se mantiene como secretario de Organización; Luis Santos Clemente, en calidad de secretario de Administración; José Luis Hernando, repite como responsable de Salud Laboral y Medio Ambiente; Asunción Villalba, en la Secretaría Para la Igualdad y Protección Social; Julio Ortega, como secretario de Comunicación y Servicios; y Pilar Santamaría, como coordinadora de los servicios jurídicos.

Ana Belén Álvarez también renueva su cargo en la Secretaría de Empleo, aunque en este nuevo mandato también será la responsable de la de Formación, tras abandonar voluntariamente la Ejecutiva la que hasta ahora era su titular, Lola Ortiz, para dedicarse en exclusiva a la sección sindical de UGT en el Gobierno de Cantabria.

Por su parte, el pleno del 12º Congreso Regional de UGT en Cantabria también ha aprobado por un 95% de votos favorables la única candidatura a la Comisión de Control Económico, que estará presidida por Eugenio Herrero e integrada por cuatro vocales: Matilde González, Luis Moras, María Antonia Villar y Andrés Gándara.

Más sindicato y justicia social

En el acto de clausura del 12º Congreso Regional de UGT, María Jesús Cedrún agradeció el apoyo dado a su candidatura, del que dijo, "no es fácil recibir un 91% de votos favorables y ninguno en contra después de 11 años y en un cuarto mandato, aunque en realidad el 91% es de todos".

La reelegida secretaria general de UGT aclaró en su discurso los principales retos del nuevo mandato, entre los que destacó que reforzar y consolidar a su sindicato como primera fuerza sindical y social de la región con casi 22.000 afiliados.

"En este congreso nos hemos reforzado como sindicato y tenemos que seguir en este camino y, es más, uno de nuestros objetivos prioritarios es fortalecer nuestras sedes, las casas del pueblo de todas las comarcas, como una referencia social, abrirlas a nuestros afiliados pero también a los desempleados, ya sean afiliados o no, porque las queremos convertir en un lugar de encuentro, donde la gente que lo está pasando mal comparta sus experiencias y reciba la ayuda y la solidaridad que necesitan".

"Tienen que ser un lugar de encuentro porque lo peor que le puede ocurrir a una persona que se ha quedado sin empleo es quedarse aislada", insistió Cedrún, tras matizar que UGT "combate y seguirá combatiendo la caridad porque lo que exigimos es justicia social, no caridad", subrayó.

"Tenemos que defender la justicia social y trabajar en este discurso porque aquí no se trata de que los que lo pasan mal reciban lo que les sobra a los demás, se trata de disponer de unos buenos servicios públicos y una suficiente protección social", agregó Cedrún.

La sindicalista advirtió que "las bases fundamentales del cambio en este país para salir de la crisis están en los centros de trabajo y la gran responsabilidad está y estará en los sindicatos de clase porque la solución está en el trabajo y tendremos que estar en la calle para ello, defendiendo junto al movimiento ciudadano el trabajo y los servicios públicos".

La secretaria general de UGT reiteró que el sindicato mantiene su estrategia de "negociación y presión" y recordó que "guste o no, la reforma laboral no se ha hecho para salir de la crisis sino para preparar el terreno a algunos para cuando se salga de ella en un escenario sin negociación colectiva y donde predomina el individualismo en las relaciones de trabajo".

Por el acuerdo actual de pensiones

En el acto de clausura también intervino el secretario confederal de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, quien criticó con dureza el informe sobre el sistema público de pensiones del grupo de expertos designado por el Gobierno, tras recalcar que su sindicato defiende el acuerdo vigente de pensiones que entró en vigor "hace apenas seis meses".

Para Ferrer, el informe del grupo de expertos dado a conocer ayer "no es neutral, está hecho al dictado del Gobierno y no condiciona nada, por lo que no sería admisible que el Gobierno se escude en él".

"Además, el informe no tiene en cuenta dos factores, los ingresos y la suficiencia del sistema, y nosotros venimos reivindicando desde hace tiempo la necesidad de buscar otras fórmulas de ingresos, como por ejemplo los impuestos al capital y la industria", señaló.

Ferrer recordó que de los 12 expertos designados por el Gobierno español, nueve de ellos están vinculados a la industria del seguro privado".