El vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez, ha considerado este lunes que el PP-A se ha "precipitado" anunciando el "cese temporal" de su participación en las negociaciones del denominado 'Pacto por Andalucía' y ha expresado sus sospechas de que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, una dirigente poco dada "al diálogo y al acuerdo", haya decidido "imponer su criterio" en las filas de los populares andaluces durante su visita de ayer a Sevilla.

Mario Jiménez ha manifestado a Europa Press que la actitud del PP-A es más "fruto del nerviosismo y la precipitación que del análisis objetivo, sosegado y razonable de la situación" y ha querido dejar claro que el Pacto por Andalucía está funcionando "muy bien", en cada una de sus mesas de trabajo y también en la de los partidos políticos.

Ha indicado además que el lenguaje que utiliza el PP-A para anunciar su no participación en las negociaciones del 'Pacto por Andalucía' es "poco adecuado en términos de relación entre las fuerzas políticas".

Ha insistido en que al PSOE-A le preocupa enormemente que "esto se haya producido hoy precisamente como consecuencia de la visita de ayer a Sevilla de De Cospedal, que no apuesta por el diálogo y el acuerdo y que ha podido imponer un criterio nacional, por encima del criterio que los partidos deben tener en Andalucía, en aras al interés general de la comunidad".

A juicio del número dos del PSOE-A, "sería muy lamentable que criterios fuera de Andalucía estuvieran jugando en la decisión del PP andaluz, porque demostraría que en nuestra comunidad hay un partido que no está poniendo por encima de cualquier otra cosa el interés de Andalucía".

Ha agregado que, en cualquier caso, lo que va mañana martes al Consejo de Gobierno es el anteproyecto de ley de transparencia y que la intención del Ejecutivo es poner en marcha todo un proceso de diálogo y de consulta con ámbitos institucionales, con colectivos afectados y con la ciudadanía en general, para conocer su valoración del texto.

Según Jiménez, "no podemos exigir en un proyecto de ley como este el monopolio de los partidos en su conocimiento y en su discusión, que sí lo tendrán los grupos parlamentarios, a partir de que el proyecto de ley entre en el Parlamento, donde se producirá un debate sosegado, tranquilo, abierto y transparente, en el que el conjunto de las fuerzas políticas y de las organizaciones sociales podrán seguir aportando para enriquecer este texto, que estará en la vanguardia de las iniciativas de transparencia en el Estado español".