El helicóptero de la Policía Nacional se ha sumado este viernes a la búsqueda de Lourdes Merino, la mujer de 46 años de Santa Fe (Granada) que permanece en paradero desconocido desde que el pasado viernes acudiera al Hospital Virgen de las Nieves junto a su marido por problemas de ansiedad y desapareciera sin llegar a entrar en el centro sanitario.

Desde ese día, agentes de la Policía Nacional pertenecientes a la Brigada de Seguridad Ciudadana y a la Brigada de Policía Judicial no han cesado en su búsqueda. De hecho, el Grupo de Homicidios de Granada, que se encarga también de la localización de las personas desaparecidas, está investigando de "manera ardua las posibles causas" de su desaparición y su posible paradero.

Durante la jornada del jueves, la Unidad de Subsuelo estuvo realizando inspecciones por la red subterránea de la ribera del Beiro, zonas próximas al antiguo acuartelamiento de los Mondragones, alcantarillado y aljibes.

El helicóptero de la Policía principalmente rastreará la ciudad de Granada y provincia, con la esperanza de poder localizar a esta mujer.

Aunque la familia y la Policía han recibido varias llamadas de ciudadanos que han creído reconocer el rostro de Lourdes en los carteles que se han distribuido por la ciudad, aún no se han obtenido pistas certeras sobre su paradero.

El portavoz de la familia explica que el día de los hechos Lourdes y su marido habían acudido al hospital porque ella estaba sufriendo ansiedad desde hace unos días. Al parecer, la mujer se bajó del coche una vez estuvo aparcado y desapareció del lado de su pareja mientras él estaba cogiendo algunas cosas del coche.

"Suponemos que no se encontraba bien y con el nerviosismo y que tenía cierto miedo a ir al hospital le dio por irse, creemos que no estaba en plenas facultades, que le dio un trastorno momentáneo, no tiene otra explicación", alegan desde la familia, que pese al "cansancio acumulado" aseguran que no cejarán en su empeño de encontrarla.

Cuando desapareció, Lourdes, que tiene dos hijos, uno de 15 y otro de diez años, llevaba puesto un pantalón de chándal negro y una sudadera azul marino.