El Pleno del Parlamento de Andalucía ha aprobado este jueves, con los votos de PSOE-A e IULV-CA, una proposición no de Ley del Grupo Socialista en la que se insta a la Junta a demandar al Gobierno central que apruebe "de manera urgente", como ya ha hecho con Extremadura y Canarias, un plan especial de empleo para Andalucía con dotación suficiente que contribuya a afrontar la excepcional situación de desempleo que hay en esta comunidad.

La Cámara también ha reclamado que la Junta demande al Ejecutivo nacional la aprobación de un programa extraordinario de inversiones en el mundo rural, para afrontar las dificultades que atraviesan los trabajadores del campo andaluz, complementario a las actuaciones que viene desarrollando la administración autonómica.

Según ha explicado el diputado socialista Carmelo Gómez en defensa de la iniciativa, "Andalucía solo está pidiendo lo que se merece" y las previsiones para el año 2013 indican que se producirá de nuevo un decrecimiento de la actividad productiva y del empleo, y ha añadido que el deterioro la economía andaluza se produce al mismo tiempo que el "fuerte ajuste de la economía española, que ha provocado una intensa caída de la demanda doméstica y de las rentas y una fuerte restricción de la financiación de la economía, tanto pública como privada, y tanto en cantidades como en precios".

Además, ha expresado su "preocupación" porque en 2012 se han destruido más de 800.000 empleos en España, de ellos más de 148.000 en Andalucía, más que en 2010 y 2011 juntos. Y todo ello, ha remachado, "mientras la ministra Báñez se encomienda a la Virgen del Rocío" y mientras el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, "no se atreve" a hablar con la prensa y se refugia "detrás de una pantalla de plasma".

Frente a ello, Gómez ha puesto de manifiesto que es "especialmente dramática" la situación que están viviendo los casi un millón y medio de personas en Andalucía que quieren trabajar y no pueden hacerlo, muchas de ellas personas jóvenes, de las cuales más de la mitad están en desempleo.

Ante este escenario, ha considerado que está "obligado a actuar", y es, ante este contexto, "donde el Gobierno andaluz está llegando a acuerdos programáticos para reunir el esfuerzo de todos en un gran Pacto por Andalucía". En esta línea, ha recordado que el pasado 20 de marzo se firmó el 'Acuerdo por el Progreso Económico y Social de Andalucía' entre la Junta y empresarios y sindicatos, que recoge medidas la dinamización del empleo que se unirán a las puestas en marcha ya por el Gobierno andaluz y que intentan combatir el aumento del desempleo en la comunidad.

El "gobierno del quejío"

El diputado del PP-A Adolfo Molina ha asegurado que la proposición no de ley presentada por los socialistas se titula 'Soluciones para el desempleo en Andalucía', pero esas soluciones no son otras que "pedir, pedir y pedir" al Gobierno de la Nación. "Andalucía lleva años intentando huir del tópico de que es la tierra del quejío y ahora nos encontramos con el gobierno del quejío", ha añadido.

Molina, que ha insistido en que el Gobierno de España no maltrata a Andalucía y que el reparto de fondos a las comunidades en materia de empleo atiende a criterios "objetivos", ha afirmado que el Gobierno andaluz es el "único responsable" de la situación que atraviesa la Comunidad. "Dejen de ser una oposición y sean un gobierno", ha añadido.

Por su parte, el diputado de IULV-CA Ignacio García ha señalado "que las medidas que se están tomando generan en los países del sur, y dentro del sur en Andalucía, cada vez más desempleo", por lo que ha advertido de que su grupo no "acertamos a entender el optimismo de algunos dirigentes del PP que hablan de que se está saliendo de la crisis mientras el paro aumenta".

Sobre todo, según ha recordado, porque los Presupuestos Generales del Estado para 2013 "reducen un 35 por ciento las políticas activas de empleo" o "en un 44 las transferencias para la formación para el Empleo" y eso teniendo en cuenta que "las políticas de austeridad y recortes ya han demostrado que generan fracaso económico y político". Ante ello, ha pedido derogar la reforma laboral y "plantearse un paquete concreto de inversiones que incrementen el consumo y la inversión pública y privada" y un "nuevo modelo productivo" basado en la "imaginación y el realismo".