El buque de investigación oceanográfica (BIO) 'Hespérides' ha regresado este miércoles a su base, en el Arsenal Militar de Cartagena, más de seis meses después de su salida y tras haber finalizado su 'XIX Campaña Antártica'. Al mando del Capitán de Fragata Javier Cervera Valverde, ha navegado durante esta Campaña 26.200 millas náuticas.

Ha realizado un total de 21 proyectos de investigación financiados con 2,1 millones de euros de la convocatoria de Proyectos de Investigación Fundamental, no orientada del Plan Nacional de I+D+i que promueve y coordina la actividad científica española en latitudes polares y en ciencias marinas.

A su llegada, el buque ha sido recibido por el Almirante de Acción Marítima, Salvador Delgado; y la directora general de Innovación y Competitividad, Maria Luisa Castaño, junto a familiares y amigos de los miembros de la dotación.

La Campaña Antártica se inició el 13 de noviembre de 2012 en colaboración con La Armada Española, el Ejército de Tierra y la Unidad de Tecnología Marina del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y varias universidades españoles, informa la Armada.

Durante este periodo, el Hespérides ha acogido a un centenar de investigadores para la realización de los proyectos de investigación. Así, 12 corresponden a las bases antárticas españolas Juan Carlos I y Gabriel de Castilla, seis a bordo del buque y otros tres en instalaciones antárticas de otros países.

En total, el coste de la campaña ha ascendido a 6,1 millones de euros, dando soporte logístico a las bases antárticas y a investigadores de Portugal, Bulgaria, Chile, Brasil y a los investigadores españoles que también han investigado en bases de Argentina, Rusia, Chile, Polonia y Ecuador.

Proyectos del hespérides

Al finalizar la apertura de las bases, comenzó el primer proyecto, que consistió en la recuperación de una línea de fondeo con diferentes equipos científicos (correntímetros, sensores de temperatura, salinidad y presión, así como de una trampa de sedimentos), depositado en la pasada campaña antártica, al norte de la Dorsal del Mar de Scotia con el fin de monitorizar la presencia/ausencia del frente de talud antártico en el talud sur del Mar de Scotia del Sur, así como su papel en la modificación de aguas intermedias de la Corriente Circumpolar Antártica.

Además, llevó a cabo un estudio hidrográfico del talud, aprovechando la presencia de los miembros del Instituto Hidrográfico de la Marina para realizar un levantamiento batimétrico de la zona en apoyo al estudio científico.

El segundo proyecto consistió en el estudió las cuencas del Mar de Scotia y la tectónica en el borde de las placas Scotia-Antártica, por medio de recorridos con levantamientos de perfiles continuos del suelo y subsuelo con cañones de sísmica, sonda multihaz, sonda paramétrica Topas, magnetómetro y gravímetro, así como la obtención de muestras mediante dragas de arrastre y testigos de gravedad con el fin de profundizar en el conocimiento de la influencia de la tectónica de placas en la circulación oceánica, los procesos sedimentarios y el clima.

A finales de febrero, tras colaborar en el cierre de las BAEs y transportar a los científicos desde las bases al puerto de Ushuaia, el buque comenzó una navegación de 1.000 millas por los Canales Patagónicos, hasta el fiordo chileno de Aysen.

En el año 2007 un terremoto originó en este área unos corrimientos de tierra que generaron un tsunami, que dejó 10 muertos como consecuencia y la destrucción de la industria salmonera de la zona.

El proyecto desarrollado allí por científicos de la Universidad de Barcelona consistió en otra caracterización de los fondos marinos, mediante levantamientos batimétricos de sonda multihaz, perfiles de sonda paramétrica, sísmica de reflexión y tomas de sedimento.

Los dos últimos proyectos a bordo del barco se han llevado a cabo de forma simultánea y durante el regreso desde Punta Arenas a Cartagena, mediante el muestreo y obtención de datos de la columna de agua desde la superficie hasta el fondo, en 110 estaciones.

Un grupo de científicos ha investigado la evolución temporal del dióxido de carbono de origen humano y la capacidad de absorción de este gas en el Océano Atlántico, y otro ha estudiado los mecanismos biológicos y biogeoquímicos que limitan la remineralización total del carbono orgánico disuelto en los sistemas marinos.

El Ministerio de Economía y Competitividad colabora estrechamente en el desarrollo de las campañas antárticas y en investigación polar con la Unidad de Tecnología Marina del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que gestionan la Base Antártica en la Isla Livingston Juan Carlos I, el Ejército de Tierra, que gestiona la base Gabriel de Castilla en la Isla Decepción y La Armada, que opera el Hespérides.

El 'Hespérides' es el único buque español diseñado para efectuar investigación científica multidisciplinar en todos los mares y océanos del planeta, lo que ha hecho posible el desarrollo de todas las investigaciones científicas planeadas.

El buque, bajo el mando del capitán de fragata Jaime Cervera Valverde, tiene una dotación de 59 marinos y puede alojar hasta 37 científicos y técnicos.

En el período 2010-2011, el buque participó en la 'Expedición Malaspina', circunnavegando por primera vez el globo de oeste a este. La campaña duró siete meses y se tomaron más de 40.000 muestras científicas.