La Policía ha desarticulado una red dedicada al tráfico ilegal de vehículos de alta gama con la detención de trece personas, que realizaban la mayoría de los robos según las demandas de sus comparadores.

Según informó hoy la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil, los coches eran sustraídos principalmente en Madrid, manipulados en una urbanización de Toledo y vendidos en el extranjero.

A los arrestados -ocho búlgaros, dos españoles, un rumano, un ucraniano y un moldavo- se les imputa las sustracciones de 37 vehículos, de los que 17 ya han sido recuperados.

Además se les imputan  delitos de asociación ilícita, falsedad documental y contra la salud pública, ya que fueron intervenidos 1.500 gramos de hachís.

Asalto a viviendas

La organización había repartido las labores: algunos se encargaban de robar los coches, otros falsificaban los elementos identificativos del vehículo y su documentación y otros trasladaban los vehículos sustraídos a países del Este principalmente, donde eran vendidos.

La organización estaba liderada por un ciudadano búlgaro, Bogdan A.R.

Los delincuentes no se limitaba a sustraer los vehículos en la calle o garajes, sino que en algunas ocasiones asaltaron viviendas cuando se encontraban durmiendo sus ocupantes, como sucedió en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón.