Los gallos, supuestamente de pelea y que se cuentan en una docena, viven enjaulados en un garaje de la citada vía de Ceutí. Una de las vecinas, que no quiere dar su nombre por temor a represalias de los propietarios de los animales, afirma haber denunciado en varias ocasiones los hechos: «Hace cuatro meses que empecé a denunciarlo en el Ayuntamiento de Ceutí, en el Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil), en los juzgados de Molina y de Murcia; pero nadie hace nada». Esta mujer explica que tuvo que ponerse en contacto con la Guardia Civil de Tres Cantos (Madrid) para que los de Murcia le hicieran caso.

El Ayuntamiento de Ceutí tiene constancia de la denuncia y la existencia de gallos de pelea en la zona y, según un portavoz, están estudiando el asunto. Esa misma respuesta es la que le dan a los afectados de la zona, que están «hartos de que les den largas».

Alrededor de las peleas de gallos, dicen algunos vecinos, se mueven grandes cantidades de dinero, a través de apuestas. Los testigos afirman que, todos los fines de semana, algunos gallos son sacados del garaje, para ser devueltos días después a sus jaulas originarias.

Dinos... dónde te quedas sin dormir por los ruidos de tus vecinos

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Las peleas son ilegales aquí

Las peleas de gallos son ilegales en toda España, excepto en las Islas Canarias, donde existe una gran tradición. Lo mismo ocurre en la mayoría de países iberoamericanos. Algunos lo consideran un deporte, pero otros, maltrato a los animales. En la Región de Murcia, algunos vecinos del barrio Espíritu Santo de Espinardo ya denunciaron, a través de las páginas de 20 minutos, que había peleas de gallos. Las multas oscilan entre los 60 y los 15.000 euros y pueden acarrear condenas de tres meses de cárcel.