Difícil de detectar

El plaguicida que envenenó a las niñas tenía fosfuro de aluminio, una sustancia muy volátil, muy difícil de detectar porque al entrar en contacto con el aire se convierte en gas y desaparece con cierta rapidez. Expertos de la empresa de desratización Tecpla indican a 20 minutos que en el mercado está prohibida la venta al público de pesticidas con estos componentes y que sólo pueden adquirirse en tiendas especializadas por empresas autorizadas y con acreditación para usarlos en el control de plagas.

El padre de las niñas ha recibido ya el alta médica, pero la madre continúa hospitalizada por haber inhalado también la sustancia tóxica que mató a sus hijas.

Despedida multitudinaria

Más de 2.000 personas acudieron ayer al sepelio de las dos niñas fallecidas, de 5 y 9 años. Entre ellas, su padre y su madre, quien obtuvo una autorización hospitalaria para asistir al entierro, pero tendrá que continuar su tratamiento. En Posadas, el ambiente era de gran conmoción.