Agentes del Equipo de Atención al Inmigrante (Edati), y del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, han detenido a dos hombres de nacionalidad española como presuntos autores de un delito contra los derechos de los trabajadores, otro contra la salud pública y otro de estafa.

Según ha informado el Instituto Armado en una nota, la investigación que ha permitido la detención de estas dos personas se originó con la denuncia de cuatro mujeres de nacionalidad marroquí quienes manifestaron ante los agentes las condiciones "infrahumanas" en las que vivían, "obligadas por las circunstancias laborales", en una finca dedicada a cultivos agrícolas en Palos de la Frontera.

Ante la denuncia, los agentes del Edati, grupo especializado en el tratamiento a inmigrantes que tienen base en Palos y en Lepe, iniciaron una serie de indagaciones para verificar las circunstancias de estas trabajadoras. Para ello, contaron con la colaboración del Seprona, que se desplazó hasta la finca y cuyos agentes realizaron una "minuciosa" inspección ocular.

Con el examen del lugar se confirmó que el agua, presuntamente potable del interior de la vivienda, "era conducida a través de una goma que directamente atravesaba las aguas fecales". También que éstas aguas fecales, eran vertidas a los lomos de los cultivos de fresas de la finca. Un inspector de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, colaboró en la extracción de muestras de estos residuos.

De igual modo, los investigadores de la Guardia Civil hallaron que, una de las mujeres inmigrantes, se había visto en la obligación de realizar un pago de 1.500 euros a los ahora detenidos, precio que habían fijado para realizar "la contratación laboral y así que esta mujer pudiera regularizar su situación en España".

Equipo de atención al inmigrante

Dentro de la política de acercamiento al ciudadano que la Dirección General de la Guardia Civil viene impulsando en los últimos años figura la de prestar atención a un sector de la población vulnerable y de características muy específicas como es el inmigrante.

En el año 2000 se constituyeron estos equipos con el fin de satisfacer las necesidades de protección de sus derechos, sobre todo en materia de seguridad. Para ello, estos equipos han de estar cerca de las preocupaciones del inmigrante, ser conocidos por este sector de población y estar en contacto permanente con él.

Según el último balance de las actuaciones llevadas a cabo por los Edati durante el pasado año muestra que, de las casi 12.000 actuaciones llevadas a cabo en esta materia, la mitad han tenido lugar en la provincia de Huelva, seguida por Almería, donde se han llevado a cabo más de 1.700 asistencias.

La Guardia Civil ha instruido las correspondientes diligencias que, en unión de los detenidos, han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Moguer.