El drago de la Escuela de Bellas Artes no es recuperable porque todas las ramas principales están fracturadas

El drago de 260 años de antigüedad que se ubicaba en la Escuela de Bellas Artes de la capital gaditana y que cayó al suelo hace unos días es, según los informes técnicos de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio ambiente, no recuperable, porque todas las ramas y yemas terminales se vieron afectadas en la caída y por lo tanto, no hay continuidad en ningún caso desde el tronco principal hasta las yemas.
Drago caído
Drago caído
EUROPA PRESS/ARCHIVO
Drago caído

El drago de 260 años de antigüedad que se ubicaba en la Escuela de Bellas Artes de la capital gaditana y que cayó al suelo hace unos días es, según los informes técnicos de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio ambiente, no recuperable, porque todas las ramas y yemas terminales se vieron afectadas en la caída y por lo tanto, no hay continuidad en ningún caso desde el tronco principal hasta las yemas.

Según se detalla en el último informe remitido por la Junta de Andalucía, el árbol no podrá ser recuperado porque la altura a la que se insertaba el follaje era mayor que la anchura del patio en el que se encontraba, y en su caída la copa se desplazó por una de las paredes de la Escuela de Bellas Artes provocando la rotura de las ramillas terminales y un "colapso total" de la copa que finalmente ha quedado con una altura de unos 2,5-3 metros desde el suelo.

De hecho, precisa que todas las ramas principales están rotas o fracturadas desde su punto de inserción en el tronco, o un par de metros más arriba.

Para su posible recuperación, se ha valorado la estructura actual de la copa, concluyendo que "no hay continuidad en ningún caso desde el cepellón y tronco principal hasta las yemas viables", condición que a tenor de la biología de la especie, y en consonancia con la opinión de los diferentes especialistas consultados, era imprescindible para poder abordar, con un mínimo de garantías de éxito, la recuperación del ejemplar.

En este contexto, las medidas más recomendables a adoptar a partir de este momento, según el mencionado informe, sería el de trasladar las ramas viables como esquejes a un lugar adecuado, por si se decide su futura replantación, pero para que ésta sea posible, los esquejes deben mantenerse durante un periodo variable (a veces, hasta un año) a salvo de la humedad para que se sequen lo antes posible.

Además, se continuaría con el tronzado de los restos de la copa más grandes y del tronco, ya sí contando con medios mecánicos (motosierra), hasta alcanzar un tamaño transportable. Una vez completado el tronzado, se procedería a su carga en cuba autorizada con camión-pluma y transporte a vertedero, para lo que se requeriría la colaboración del Ayuntamiento y la Policía Local, dado que sería necesaria la señalización y corte al tráfico y peatones del tramo de la Calle del Tinte en la que trabajarían los operarios.

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