El secretario general del PSPV, Ximo Puig, ha reconocido que su primer año al frente de la formación socialista valenciana ha sido difícil por las "inercias" del partido pero "sobre todo por el contexto social y económico", ha afirmado. En este punto, ha advertido de que si no recuperan la credibilidad ante los ciudadanos no serán alternativa de gobierno al PP "por muchos casos de corrupción que les ahoguen".

Puig se ha expresado de esta manera en la rueda de prensa en la que ha hecho balance del año que lleva al frente de la formación socialista valenciana, tras suceder el 31 de marzo de 2012 a Jorge Alarte. En este punto, ha remarcado que no está satisfecho con los resultados alcanzados aunque "no es el momento de finalización de una etapa", ha apuntado. "Queda mucho por hacer", ha apostillado.

El dirigente socialista ha recordado que fue elegido secretario general "en medio de la peor crisis económica de las últimas décadas" y en la Comunitat, el PP "se ha convertido en un obstáculo" para salvarla, ha agregado.

Por ello, Puig ha querido "reafirmar" su compromiso de llevar al PSPV a ser una alternativa de gobierno. Para ello, el principal objetivo es "recuperar la credibilidad" porque sino, "por muy mal que lo hiciera el PP y por muchos casos de corrupción que les ahoguen, los ciudadanos no nos verán como partido de gobierno".

En este sentido, ha abundado en que el PSPV es el partido que "más ha luchado contra la corrupción" y, aunque ojalá no hubiera hecho falta", continuarán por ese camino tanto en el ámbito político como el judicial.

Premisas de la alternativa

El secretario general del PSPV ha expuesto sus tres "premisas" para ser alternativa de gobierno en la Comunitat. En primer lugar, "recuperar la confianza" de los ciudadanos en el PSPV y en las instituciones.

Para ello, ha anunciado que en el congreso nacional del próximo 27 abril presentará una "propuesta de reacción democrática" para que sea obligatoria la publicación de los sueldos, declaración de la renta de cargos "de máxima responsabilidad" en las instituciones y el partido.

En segundo lugar, apuesta por la transformación del modelo productivo, crear empleo y "blindar" en estado de bienestar. Así, ha anunciado que el próximo lunes iniciará una "gira por la industria y la innovación" para "promover la segunda generación de la política industrial valenciana".

Por lo que se refiere a las iniciativas orgánicas, Puig ha hecho hincapié en que iniciarán, a partir del comité territorial de la próxima semana, una serie de conferencias comarcales para que cada comarca "tenga su propio proyecto de futuro". Puig ha anunciado también una nueva campaña de afiliación.

La tercera de las premisas pasa por que la Comunitat "tenga peso en España". A su juicio, el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ha solemnizado la invisbilidad" de los valencianos, que ha repercutido en la financiación y las inversiones, ha dicho. En esta línea, ha remarcado su apuesta por una España federal.

"hemos aprendido de los errores"

Con esta hoja de ruta, Ximo Puig ha subrayado que el PSPV debe ser una alternativa de gobierno y, "aunque queda mucho por hacer, vamos por el buen camino y el cambio es imparable", ha afirmado el líder de los socialistas valencianos, que ha dicho que han "aprendido de los errores".

En esta línea, Puig ha negado que haya ninguna encuesta "publicada y no publicada que diga que no va a haber cambio" de gobierno en la Comunitat Valenciana porque el PP "ha perdido la mayoría". No obstante, al PSPV "le queda camino para conseguir una mayoría social amplia", ha apuntado.