Dos viticultores del municipio segoviano de Cuéllar han puesto en marcha el proyecto 'Uvas Nómadas', en virtud del cual pretenden elaborar vino a partir de las cepas de una zona distinta de la península Ibérica cada año, una idea que buscan financiar gracias al micromecenazgo o 'crowdfunding', una inversión que se devolverá en forma de botellas.

Así, en esta añada 2013, Elisa y Rubén, los promotores de la iniciativa, se han fijado como objetivo producir 1.500 kilos de garnacha de Ávila, provincia que será su punto de partida, ya que consideran que la variedad de uva del lugar ha estado "infravalorada" hasta hace unos años, a pesar de que cuenta "con muchísimos valores enológicos, culturales y sociales" en el sur de Castilla y León.

Elisa y Rubén son los gerentes de Vinos Malaparte, la bodega que se encargará de la elaboración de este vino "trotamundos". En el pasado, ambos fueron "nómadas", antes de convertirse en "elaboradores de vinos con alma y siempre con una historia". Ahora, pretenden fusionar esos dos aspectos de su vida y recorrer la Península mientras dan vida a sus caldos.

Actualmente, Vinos Malaparte se centra en las variedades tempranillo y moscatel de grano menudo, pero su intención es "recorrer todas las variedades" con que cuenta la Península.

Para poder llevar a cabo este "sueño", sus ideólogos buscan la colaboración de pequeños mecenas, a los que informarán sobre el proceso de elaboración del viñedo, sobre su viticultor, sobre el seguimiento de la maduración y vendimia y acerca de la elaboración en su bodega de Cuéllar.

Información y opinión

Según han informado a Europa Press, los inversores no sólo tendrán notificación de "cada decisión" que tomen, sino que además se les pedirá opinión para aquellas "más sencillas".

Todo el dinero obtenido mediante este sistema irá destinado "íntegramente" a los costes de compra, transporte de la uva, elaboración, embotellado, etiquetado y posterior envío de las botellas resultantes a los inversores, de modo que "todas las aportaciones se traducen en botellas de vino".

El proyecto comenzará durante el próximo mes de mayo, cuando tanto Elisa como Rubén viajen a la provincia de Ávila para elegir viñedo y hacer los primeros contactos con los viticultores. "Haremos el seguimiento del viñedo durante el verano y en las semanas previas a la vendimia, que en esta zona tiene lugar entre septiembre y octubre, se podrá ver cómo hacemos los controles de madurez", han apuntado.

Una vez recolectada, la uva será transportada a Cuéllar, donde se depositará en la bodega Vinos Malaparte para comenzar todo el proceso de elaboración, en el que los inversores estarán "puntualmente informados". Tras la primera fermentación, esperan que en torno a Navidad concluya la conversión maloláctica, cuando el ácido málico de la fruta se transforma en láctico.

Así, hacia el mes de marzo de 2014, y "tras un ligero paso por barrica", se embotellará y etiquetará el caldo, que "estará listo" para ser enviado a los domicilios de los mecenas o para que éstos "pasen a recogerlo", los cuales tendrán, como "regalito", una visita a la bodega con su cata correspondiente.

1.300 BOTELLAS

Según las mismas fuentes, el resultado obtenido será aproximadamente 1.300 botellas de vino "cien por cien garnacha".

Los interesados pueden ampliar información o ponerse en contacto con los responsables de la iniciativa a través de la dirección de correo electrónico uvasnomadas@vinosmalaparte.es, así como en la página web de Vinos Malaparte y en sus perfiles en las redes sociales Facebook y Twitter.