La temporada de 2013 de turismo activo y deportes de aventura en Lleida ha arrancado con 206 empresas que ofrecen actividades de tierra, mar y aire a todos los aficionados, lo que supone un 20% más respecto a las 171 empresas del año pasado y un 45% más en comparación con los datos de 2009, cuando se contabilizaron 142.

En la presentación de la nueva temporada este lunes, el presidente de la Diputación de Lleida, Joan Reñé, ha explicado que el crecimiento registrado en el número de empresas es "un buen termómetro para medir las garantías" con las que se afronta esta campaña.

De este modo, continúa la expansión de un sector que se introdujo en el territorio en 1980, y se consolida el liderazgo del Pirineu y Terres de Lleida dentro de toda España en la oferta de turismo activo y deportes de aventura pensados para todo tipo de públicos y de edades tomando el relevo a la temporada de esquí, que finaliza en Semana Santa.

Las fuertes nevadas de invierno han permitido tener unas perfectas condiciones para todas las actividades de agua, lo que junto a todas las novedades para esta temporada 2013, ayudará a conseguir el objetivo de superar los 625.000 servicios anuales, tras el descenso registrado la temporada anterior de entre un 5% y un 10% en la actividad —subió el turismo extranjero, mientras que decayó el procedente de Catalunya y el resto de España—.

"Hemos hecho una apuesta clara por extender nuestros servicios más allá de las fronteras y por hacer del mundo nuestro mercado potencial ofreciendo la excepcionalidad de nuestro turismo", ha destacado Reñé.

El presidente de la Asociación de Empresas de Deportes de Aventura del Pallars Sobirà, Florido Dolcet, ha destacado que las reservas de agua en forma de nieve no sólo aseguran las actividades de agua, como el ráfting o el kayak, sino que triplican las del año pasado.

El presidente del Consell Comarcal del Pallars Sobirà, Llàtzer Sibis, ha destacado los trabajos realizados para mejorar los accesos con el objetivo de mejorar la seguridad, las actividades acuáticas y para que se pueda percibir "la estética" del río de la Noguera Pallaresa en los descensos.

El sector está preocupado por la afectación que puede tener la subida del IVA aprobada por el Gobierno y en vigor desde septiembre debido al incremento de 13 puntos, del 8% al 21%, lo que se suma al contexto general de crisis económica.

Sector estratégico

El turismo activo y los deportes de aventura en Lleida son un sector estratégico por su contribución a la desestacionalización turística —la temporada se alarga desde la primavera hasta el otoño—, y porque fija la población en el territorio, actúa como motor económico y refuerza el tejido turístico de la zona, cuyos principales atractivos son los espacios naturales, lagos, montañas y ríos caudalosos.

Los deportes de agua son los más solicitados con un 62% de los servicios contratados -el ráfting es la actividad estrella, seguida del barranquismo, el hidrospeed y el kayak—, mientras que en los deportes de tierra la primera posición la ocupa la BTT con un 36% de la demanda —además de la hípica, el trekking y las rutas en 4x4—, y el parapente entre los servicios de aire, entre más de 50 actividades.

62

Millones de impacto

El cliente que visita las comarcas de Lleida realiza una media de gasto diario de 105 euros —35 en las actividades y 70 en el alojamiento, comidas y otros gastos—, según datos de un estudio del Patronato de Turismo de 2012, si bien el aumento del IVA hará que la media de precio de las actividades se incremente en unos cuatro euros si se acaba trasladando todo el incremento al precio final del servicio.

Según Reñé, el volumen de negocio directo de este sector, que ocupa a unas 2.200 personas, es de 20,6 millones de euros, considerando únicamente los servicios ofrecidos por las empresas del sector, si bien el impacto es de 62 millones si se tienen en cuenta los gastos de alojamiento, comidas y otros extras, lo que supone un 6,2% de los ingresos que genera el sector turístico de Terres de Lleida.

El perfil de este tipo de turista es procedente, sobre todo, de Barcelona y del su área metropolitana, aunque continúan siendo importantes los flujos procedentes de Madrid, Valencia y País Vasco, y de un tipo de cliente que se desplazaba con amigos, se ha pasado a otro que realiza estas actividades con su familia o pareja aprovechando la Semana Santa y los festivos.