El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha manifestado su confianza este miércoles en que los empresarios utilicen la reforma laboral para crear empleo, aunque ha reconocido que hasta el momento no ha contribuido a ello.

Herrera se ha expresado así en respuesta a una pregunta del portavoz del Grupo Mixto, José María González, quien ha cuestionado si sectores como la automoción y el eólico se "desmoronan", algo de lo que ha culpado a la reforma laboral, que el presidente de la Junta ha pedido que no se utilice como "chivo expiatorio".

En este marco, el jefe del Ejecutivo autonómico ha calificado de "exageración sin fundamentos" que se hable del "desmoronamiento" de estos sectores, que además considera que no son los únicos que dan "muestras de resistencia", como el sector de la industria agroalimentaria, a una crisis que dura seis años y que pasa por su segunda recesión.

Así, considera injustificado que se vinculen los problemas por los que puedan pasar la automoción y otros sectores como el eólico con las políticas de ajuste, ya que hay otros factores como la demanda interna y externa, las exportaciones, etcétera, factores que provocan que empresas como Iveco o Nissan tengan que presentar expedientes de regulación de empleo.

Sin embargo, Herrera considera que no hay que utilizar a la reforma laboral como "chivo expiatorio" porque se han atribuido a la misma diferentes cuestiones que suponen una antítesis porque se habla de que han propiciado los acuerdos para planes industriales junto con el esfuerzo de los trabajadores o un incremento de las exportaciones, pero ahora también pretenden atribuirse cierres.

El presidente de la Junta ha reconocido "problemas" pero diferentes según los sectores y ha rechazado hablar de "desmoronamientos" en empresas de la automoción, que emplean en la Comunidad a más de 40,000 personas tanto en las principales como en las auxiliares.

Problemas diferentes

Por lo que se refiere al sector eólico, ha recordado la disminución de la demanda de energía eléctrica, el déficit de tarifa o la falta de alternativas como la exportación que hacen que el sector sufra las consecuencias de la crisis, a pesar de que la Comunidad es la primera de España en producción de esta energía, con 5.500 megavatios instalados, la cuarta parte del total del país.

Frente a ello, considera que hay que "reorientar" a estas industrias hacia diferentes posibilidades como el mantenimiento de las infraestructuras de generación eólica, la reposición de materiales de este tipo de instalaciones o ver de qué manera se hacen rentables sin las primas a renovables.

Herrera ha asegurado que el Gobierno autonómico trabaja por su futuro, que es "clave" en la industria de la Comunidad y su futuro.

Por su parte, José María González se ha mostrado convencido de que muchas de las decisiones que se han tomado están alrededor de los cierres o los expedientes de regulación de empresas como Alstom y Automotive o los de otras más grandes como Nissan e Iveco.

A su juicio, determinados apoyos a planes industriales como el de Renault se hacen "a costa del empleo" y ha criticado las consecuencias de la reforma laboral y la rebaja de costes salariales que hacen que los trabajadores menores de 40 años pierdan poder adquisitivo y los que superan esta edad no tengan expectativas de empleo.

Asimismo, considera que detrás de prácticas para 800 alumnos de Formación Profesional en Renault hay riesgos para numerosos empleos y ha incidido en que Castilla y León no se puede "permitir el lujo" de perder poder adquisitivo y capacidad de demanda interna.