Juan (nombre ficticio), prefirió encararse con su oponente y le devolvió la torta. «Lo demás no tiene nombre. Más de quince gitanos, familiares del otro niño, saltaron la valla del instituto y comenzaron a pegar a mi hijo», afirma la madre. Los seis profesores que estaban de guardia en el recreo intentaron mediar en el linchamiento del menor, y algunos también recibieron palos.
La batalla campal finalizó cuando la Guardia Civil hizo acto de presencia y pudo poner orden. El joven agredido tuvo que ser atendido de numerosas lesiones en el centro de salud de la localidad y varios profesores también resultaron dañados de diversa consideración.
Los padres del chaval no denunciarán a los agresores, pero sus compañeros han convocado una manifestación para hoy porque, según dicen, «las riñas y las peleas son continuas».
El instituto, por su parte, ha solicitado a la Delegación de Educación que ponga más medidas de seguridad, entre ellas vigilantes, y el Ayuntamiento intensificará la presencia policial en la zona.
Una zona conflictiva
El instituto Alfaguara, de unos 500 alumnos, está en obras y los agresores entraron en el recinto derribando las vallas perimetrales puestas mientras duran los trabajos de ampliación. El centro está ubicado en una de las zonas más conflictivas de la localidad. De hecho, hace poco el cuartel de la Policía Local fue trasladado a ese barrio para prevenir altercados.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios