El que fuera director general de la Agencia Regional de Sanidad y Consumo, dependiente de la Consejería de Salud, entre 1999 y 2011, Juan José Llaneza, ha negado categóricamente haber favorecido a ninguna empresa en materia de contratación. Y menos por razones políticas. "Nunca he hecho ningún favor al PSOE desde mi ámbito profesional", ha indicado.

Llaneza se ha pronunciado en estos términos en la comisión de la Junta General del Principado de Asturias (JGPA) del caso 'Marea', que investiga una presunta trama de corrupción en la contratación pública durante la última etapa del Gobierno socialista. La comisión recibió en su día un documento anónimo que hablaba de irregularidades en el ámbito de la Agencia.

A preguntas de los miembros de la Comisión, Llaneza señaló que en el proceso de contratación para equipar los cinco centros de formación para el consumo que hay en el Principado se presentaban pocas empresas por causas que él desconocía. "Había gente que se retraía, desconozco por qué", ha manifestado, añadiendo que "no me gustaba que siempre fuese el mismo. Casi siempre se llevaba los contratos la empresa Interinfancia.

Ha admitido que para la gestión de los centros, la Agencia tenía "externalizadas" a dos personas. Pero ha dejado claro que "en ningún caso" hubo ilegalidad.

Preguntado sobre si conocía que las tres empresas que solían concurrir tenían un mismo domicilio o que en ellas participaban exaltos cargos socialistas, Llaneza ha manifestado que no contaba con esa información porque él ya tenía "mucho trabajo" y no podía meterse en la "maraña" de si en una compañía trabajaba "la cuñada de tal o el hermano de cual". Además, ha dicho que nunca participó en mesas de contratación.

"Yo nunca pertenecía al PSOE ni estoy afiliado", ha dejado claro. Ha reivindicando sus 40 años en la administración del Principado de Asturias y se ha mostrado apenado porque un anónimo le sitúe en esta tesitura. "En mi trabajo me he podido equivocar, pero en ningún caso en el intento de favorecer a nadie, jamás", ha apuntado. Además, ha dicho que le quedan pocos meses y que quiere jubilarse "con la cabeza alta".

Por último, en lo que se refiere al anónimo, ha dicho que tiene un "afán injuriante" y que "busca venganza" porque pretende "hacer daño". A su juicio, cuando alguien acusa a otra persona lo tiene que hacer con fundamento, "mirando a los ojos".