La juez manda a prisión al atracador de Infiesto (Asturias)

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción único de Infiesto, en el concejo asturiano de Piloña, de acuerdo con el Ministerio Fiscal, ha dictado una orden de prisión provisional, comunicada y sin fianza por un delito de detención ilegal para el hombre que este lunes intentó atracar un banco reteniendo a clientes y empleados en su interior en Infiesto.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción único de Infiesto, en el concejo asturiano de Piloña, de acuerdo con el Ministerio Fiscal, ha dictado una orden de prisión provisional, comunicada y sin fianza por un delito de detención ilegal para el hombre que este lunes intentó atracar un banco reteniendo a clientes y empleados en su interior en Infiesto.

A la hora de redactar el auto, la juez se ha apoyado además en el informe emitido por el Servicio de Psiquiatría del Hospital del Oriente, que ha evaluado al sujeto tras el suceso y ha concluido que el hombre, que ya ha sido trasladado al Centro Penitenciario de Villabona, no precisaba su ingreso en un servicio especializado en patologías psiquiátricas, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA).

El suceso de produjo este lunes cuando el hombre, de 49 años y vecino de Villamayor, intentó atracar una sucursal del BBVA de la Avenida de Covadonga, en Infiesto (Piloña) con una pistola de bolas.

Entró en la entidad bancaria a las 10.15 horas y retuvo a varios empleados y a clientes. El detenido mostraba una pistola en la cintura y posteriormente llegó a enseñarla sin amenazar directamente a nadie.

A las 10.20 horas, el atracador permitió el desalojo de los clientes y una empleada aprovechó la ocasión para salir también de la sucursal. En ese instante dentro del banco se encontraba el atracador, un empleado y la directora de la sucursal.

Posteriormente, a las 11.00 horas, el atracador dejó salir a la directora y se quedó solo con un empleado que logró huir cuando el atracador le envió a la puerta a recoger unas botellas de agua que había pedido.

Cuando ya se encontraba sólo dentro de la sucursal, la Guardia Civil intentó sin éxito una negociación para que abandonara el banco, e incluso el atracador amenazó con ahorcarse, momento en el que los agentes aprovecharon para entrar y detenerlo. Tras capturarlo sin que usase la pistola, fue atendido por una ambulancia.

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