La escritora cubana Zoe Valdés ha resultado ganadora en la XXXVII edición del Premio Azorín de Novela con su obra La mujer que llora, en la que recrea a través de la literatura la vida y sentimientos de una amante del pintor Pablo Picasso, tras su ruptura sentimental en el París de 1930.

Valdés se ha presentado al certamen bajo el seudónimo Gloria Julián Cécil, al tiempo que la novela ha concurrido al galardón, dotado con 68.000 euros, bajo el primer título La salvaje inocencia.

Además, ha expuesto que tardó cerca de seis o siete años en terminar la obra, "con varios intervalos"La novela cuenta la experiencia que la artista surrealista Dora Maar, pintora, fotógrafa y escultora, vivió junto a Picasso en una época marcada por la ocupación Nazi, la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Civil española.

"Tras haber sido abandonada," por el pintor", decepcionada, empieza a reflexionar sobre lo que habían representado diez años juntos", ha explicado la escritora en la rueda de prensa posterior a la entrega del premio.

Igualmente, ha indicado que en la novela hay contenido autobiográfico, "momentos biográficos que a través de la literatura dejan de serlo", ha añadido.

Además, ha expuesto que tardó cerca de seis o siete años en terminar la obra, "con varios intervalos", ya que en una primera versión descubrió que el enfoque era "demasiado intimista", y quiso que Maar "participara en la obra", de la misma manera que consultó numerosa bibliografía sobre la protagonista para su elaboración.

La autora cubana también ha resaltado que los momentos biográficos sobre Maar han sido novelados, y ha incidido en que junto a Picasso "había una gran artista, surrealista", que representaba "el soporte sentimental y la conciencia social" del pintor, al tiempo que ha incidido en que era una mujer "muy inmersa en los acontecimientos políticos" de la época, tanto de París como de España.

Por otra parte, interrogada sobre si 'La mujer que llora' es una novela triste, ha manifestado que "vivimos en una época en que parece que todo tiene que ser alegre", si bien ha agregado que ella tiene "una gran pasión por la melancolía". "Los cuadros que me entristecen acaban dándome gran alegría", ha añadido.

En el mismo sentido, y ante la posibilidad de que sea una novela aplicable a la actualidad, ha apuntado que relata la vida de personas que "pese al momento tremendo en que viven, tienen fe en el arte, que es lo que mueve a la gente, la necesidad de vivir la vida a través del arte".

Junto a Valdés han comparecido en rueda de prensa el diputado provincial de Cultura y presidente del jurado, Juan Bautista Roselló, el escritor Juan Eslava, y el crítico literario Manuel Cifo, quienes han subrayado que la decisión ha sido tomada por unanimidad.

Además, Eslava ha hecho hincapié en que tras leer la novela, ha "descubierto la mejor plasmación de la vida cultural de París de 1930", la cual ha calificado de "deslumbrante", y ha enfatizado el "espíritu fuerte de la mujer que consigue escapar de la sombra" del pintor. Valdés es autora, entre otros, de El todo cotidiano (2010), La ficción Fidel (2008), La cazadora de astros (2007), Bailar con la vida (2006), o La eternidad del instante (2004).

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