El coordinador de la Dirección General de Tráfico (DGT) en Castilla y León, Luis Bermúdez, ha advertido hoy de que una hipotética elevación del límite de velocidad a 130 kilómetros por hora en determinadas autovías y autopistas, tal y como recoge el borrador del anteproyecto del real decreto por el que se modifica el Reglamento General de Circulación, tendría mínimas repercusiones en las carreteras de la Comunidad debido a que los tramos incluidos serán "muy restringidos".

Bermúdez, a su vez jefe de Tráfico en Valladolid, ha precisado que en el supuesto de que dicha iniciativa saliera adelante no sería fácil aplicarla en Castilla y León, toda vez que la elevación a los 130 kilómetros por hora exige, además de determinadas condiciones en las carreteras, que las vías no registren una concentración de accidentes.

"Yo no creo que sean muchos los tramos en la Comunidad donde se pueda implantar esta iniciativa", ha insistido Bermúdez, quien, en declaraciones recogidas por Europa Press, ha puesto como ejemplos la A-6 o la A-62, vías donde casi todos sus tramos contabilizan siniestros.

Además, y en consonancia con el delegado del Gobierno en Castilla y León, Ramiro Ruiz Medrano, el coordinador regional de la DGT ha recordado que hasta el momento se trata de un mero borrador, que no sólo contempla el referido incremento de velocidad sino también reducciones en otros tramos, y que el mismo se encuentra actualmente en "suspenso" tanto en el Ministerio del Interior como en el Consejo Superior de Tráfico y Seguridad de la Circulación Vial, órgano este último donde hay confrontación de opiniones entre entidades privadas y las asociaciones de víctimas de accidentes.