El eurodiputado de Izquierda Unida, Willy Meyer, ha pedido al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, que presente una queja formal ante Marruecos por haberle expulsado "de manera intolerable" de su territorio cuando pretendía llegar, junto con otros tres europarlamentarios, al El Aaiún, capital del Sáhara Occidental.

El incidente tuvo lugar este miércoles cuando Meyer se disponía a volar desde Casablanca hasta El Aaiún. Se trata de la tercera vez que el dirigente de IU es expulsado del país magrebí para impedir su entrada en territorio saharaui, según ha recordado él mismo durante una comparecencia ante los medios en el Congreso.

Meyer ha denunciado que no existen "precedentes" de la expulsión de una delegación oficial del Parlamento Europeo que viaja al Sáhara en una "misión de observación" y que estaba integrada por miembros de cuatro grupos parlamentarios: Izquierda Unitaria, Los Verdes, el Grupo Socialista y el Liberal. De hecho, ha anunciado que tienen intención de volver a intentarlo.

RELACIÓN 'PREFERENTE'

Con la ue

Según su relato, la Policía de fronteras marroquí se dirigió a los eurodiputados a su llegada a Casablanca para informarles de que tenían orden del Gobierno de no dejarles continuar trayecto hacia El Aaiún. "Fuimos reembarcados en el mismo avión y repatriados en un acto intolerable", ha sentenciado, recordado que Marruecos mantiene una "relación preferente" con la Unión Europea.

La intención de la delegación de la Eurocámara era cumplir el mandato de la institución de pedir la celebración de un referéndum de autodeterminación, la liberación de todos los presos políticos saharauis y que se haga un seguimiento del los incumplimientos de los Derechos Humanos por parte de la Misión de la ONU para este territorio "ocupado".

"Es intolerable que la política de Marruecos respecto al Sáhara que impune", ha subrayado Meyer, censurando el "apagón informativo" que "quiere imponer" sobre lo que pasa allí, donde, ha recordado, "se están pisoteando permanentemente los Derechos Humanos y se están expoliando los recursos naturales".

Los eurodiputados expulsados también van a pedir a la Alta Representante de la Unión Europea, Catherine Ashton, que exija una condena del Ministerio de Asuntos Exteriores de Marruecos y esperan que el presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, promueva también una declaración de condena.

Al parecer, fue el embajador de Marruecos ante la Unión Europea la que alertó del viaje de la delegación, a la que se tildaba de "proargelina y prosaharaui", avisando de que pretendían "poner en tela de juicio la identidad territorial marroquí", un eufemismo, según el eurodiputado, que usa el país magrebí para arrogarse la soberanía sobre territorio saharaui.