El presidente del Principado de Asturias, Javier Fernández, considera que la nueva relación que pasen a tener el PSOE y el PSC después de las discrepancias manifestadas en las últimas semanas por el derecho a decidir deben incluir que ambos partidos manifiesten un "único discurso en los asuntos de Estado".

"Ese nuevo modelo de relación debe permitir que los socialistas tengamos un único discurso en el conjunto del país en lo que tiene que ver con los asuntos de Estado. Eso es lo que me parece que tiene que ocurrir y estoy convencido de que es justamente lo que va a ocurrir", ha explicado durante su intervención en un desayuno informativo del Foro Nueva Economía en Madrid.

Fernández ha reconocido que ambos partidos tienen "discrepancias de interpretación" sobre ciertos temas, pero opina que ambos y también España "un Partido Socialista que tenga su discurso único sobre los asuntos de Estado".

En cualquier caso, el presidente asturiano ha indicado que el PSC está "sometido a una presión brutal" porque en Cataluña "se le critica por españolista y en el resto de España por nacionalista", algo de lo que ha culpado a los partidos nacionalistas, los cuales, a su juicio, han conseguido que a cualquier formación "con adscripción nacional" se le vea como enemigo de su comunidad autónoma.

Un momento "crítico"

A pesar de ello, ha dejado claro que considera "grave" el hecho de que 13 diputados del PSC votaran esta semana a favor de dos resoluciones sobre la consulta soberanista en Cataluña, de modo que le parece "bien" que este partido y el PSOE recompongan sus relaciones, ya que éstas pasan por "uno de sus momentos más críticos".

En cuanto a la postura de la cabeza de lista del PSC por Barcelona, Carme Chacón, Fernández ha dicho que le parece "muy bien" que no estuviera de acuerdo con sus compañeros en dichas votaciones, si bien ha aclarado que le hubiera parecido "mejor" que se manifestara en contra.

En todo caso, ha subrayado que el derecho a decidir es "un reclamo nacionalista" que se está "disfrazando con el ropaje de la exigencia democrática", pero ha advertido a los partidos nacionalistas de que "las constituciones, incluso las reformadas, no tienen por costumbre prever la secesión". "¡Qué le vamos a hacer!", ha ironizado el presidente del Principado, para después enfatizar que "lo que a todos concierne, por todos se decide", de modo que "la independencia de Cataluña "será siempre un asunto español".

Para Fernández, a la situación creada por la crisis económica se ha unido el "desafío soberanista, institucional", de la Generalitat de Cataluña, que está "tensando las costuras constitucionales". En su opinión, "esperar a que las cosas escampen no es suficiente", por lo que ha instado a todos los "responsables institucionales, políticos y económicos" a hacer frente a ello sin "demora".

"fatiga" de la constitución

Aunque ha reconocido, en presencia del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, que una reforma constitucional no es la "panacea" para ello, sí ha defendido acometer ciertas modificaciones en la Carta Magna, ya que considera que su "petrificación" no la hace "más fuerte". Es más, ha asegurado que "la mejor manera de preservarla es reformarla".

El dirigente asturiano ha señalado que la Constitución sufre una "fatiga" motivada, entre otras cosas, por "las tensiones vinculadas al desarrollo del Estado autonómico", lo cual es debido, a su juicio, a la existencia de partidos nacionalistas.

De este modo, considera que la reforma de la Carta Magna debe plantearse desde el punto de vista de buscar una "solución" para el Estado de las Autonomías no para "satisfacer sentimientos". Así, propone "redefinir las competencias exclusivas del Estado y señalar cuáles pueden asumir voluntariamente las comunidades, articular un sistema de relación multilateral y bilateral, asentar el carácter supletorio del Derecho estatal y reformar el Tribunal Constitucional".

Es "preciso" un acuerdo político

Sobre el planteamiento que ha hecho Rubalcaba de avanzar hacia un modelo federal, Fernández ha indicado que "España es ya un Estado federal porque el Estado autonómico es la forma un poco vergonzante e incompleta que adopta el federalismo en España". "Llámese como se llame, la urgencia es acabar con la tensión continua a la que está sometido el Estado. En eso deben encontrarse las fuerzas políticas. Es política y democráticamente preciso", ha advertido.

El presidente de Asturias también se ha referido al conocido como 'caso Bárcenas', del que ha dicho que contribuye al "desprestigio de la política". En su opinión, tanto el Gobierno como el PP tienen "miedo a nombrar" al extesorero 'popular' y mientras lo tengan "no puede haber la firmeza necesaria para afrontar" este asunto.

Para Fernández, una de las medidas más "útiles" para hacer frente a la corrupción en la política es la transparencia, pero también cumplir lo que se promete y "en lo que uno cree".