Artur Mas se ha quedado solo frente al resto de formaciones políticas, incluida Unió Democrática de Catalunya (UDC), en su intento de seguir deslegitimando la elección de José Montilla como próximo presidente de la Generalitat.

Incluso dentro de la formación nacionalista, Josep Antoni Duran i Lleida ha llamado a CiU a superar las "heridas" postelectorales tras quedar fuera del gobierno y ha reconocido la "legitimidad" del futuro presidente catalán, José Montilla.

Mas ha calificado de "comedia" la ronda de consultas del presidente del Parlament, Ernest Benach, con los líderes de las formaciones políticas para proponerles a José Montilla como presidente.

El presidente de CiU ha vuelto a negar hoy "autoridad política y moral" a José Montilla para gobernar Catalunya después de los resultados obtenidos.

El líder nacionalista ha vuelto a criticar ante Benach que su partido no tenga derecho a poder gobernar después de ser quien más votos recibió en los comicios.

Pasar página

Duran i Lleida ha instado a la coalición nacionalista a "pasar página" y ser conscientes de que "de vez en cuando toca estar en la oposición. Tenemos que superar estos días de desencanto, dolor y preocupación y mirar hacia adelante".

El portavoz parlamentario de CiU, Felip Puig, afirmó la semana pasada que Artur Mas será "el otro presidente de Catalunya" al ostentar el "liderazgo moral".

Críticas de la oposición

Incluso los partidos que junto a CiU formarán la oposición en el Parlament catalán han criticado la actitud de Artur Mas.

Josep Piqué (PPC) ha reprochado esta actitud a Artur Mas y le ha dicho que "la autoridad política y moral la demostrará en su quehacer" como presidente de la Generalitat.

Después de reunirse durante 25 minutos con Benach, Piqué consideró el pacto tripartito "dentro de la normalidad política" y le atribuyó "plena legitimidad democrática".

El líder popular anunció al presidente del Parlament una oposición "exigente".

Albert Rivera, de Ciutadans, ha manifestado que no encuentra "razonable" que Artur Mas cuestione la legimitidad de José Montilla pero que será "muy crítico con el PSC que ha jugado con la ambigüedad en la campaña y después ha vuelto a reeditar el tripartito".