Estos presos forman parte del programa que desarrolla el Aula Medioambiental de la prisión junto al Servicio Educativo de Sadeco. Cada martes, la cuadrilla sale para limpiar la basura «donde no pueden llegar los operarios de la empresa municipal de saneamientos», según señala el responsable de esta iniciativa en Sadeco, Francisco Valverde. Así, los presos limpian los entornos de las afueras de la ciudad, aquellos donde suelen celebrarse peroles, como la zona de El Patriarca, o parajes naturales como los Baños de Popea.

En esta ocasión, en vista de que ni Ayuntamiento ni Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) se ponen de acuerdo para limpiar las riberas del río, la cuadrilla de presos ha decidido huir de la polémica y limpiar la zona en cuestión.

Se han retirado desde motocicletas hasta electrodomésticos. Y eso no es todo, porque sólo se ha limpiado una parte. En Sadeco se calcula que harán fatal unos tres días más para dejar limpias ambas márgenes.