Nortec plantea condiciones "draconianas" para la compra de Candemat, como bajada salarial del 16% y supresión de extras

El grupo vasco Nortec ha planteado condiciones "draconianas" para la compra de la fábrica Candemat de Camargo (Cantabria), al proponer una bajada salarial del 16 por ciento o supresión de pagas extraordinarias, según ha informado a Europa Press el delegado de Comisiones Obreras en el municipio, Esteban Rodero.

El grupo vasco Nortec ha planteado condiciones "draconianas" para la compra de la fábrica Candemat de Camargo (Cantabria), al proponer una bajada salarial del 16 por ciento o supresión de pagas extraordinarias, según ha informado a Europa Press el delegado de Comisiones Obreras en el municipio, Esteban Rodero.

En declaraciones a esta agencia, el sindicalista ha indicado, por tanto, que las posturas para la compra de la planta, que estaba previsto que se formalizara a mediados de este mes de febrero, están "muy alejadas" y no ve, de momento, "posibilidades de acercamiento", ya que, por ejemplo, Nortec también propone que reducir a la mitad la jornada laboral —y el sueldo— de los empleados cuando descienda el trabajo.

"Es una postura draconiana. No hay por donde coger las negociaciones", ha expresado Rodero, para criticar que Nortec ha "pensado que todo el monte es orégano".

No obstante, Rodero ha indicado que el comité de empresa está "dispuesto" a hacer concesiones para llegar a un acuerdo porque "todo es negociable", aunque ha advertido al respecto que, de momento, la postura de la factoría vasca está "bastante alejada de la realidad".

A juicio del portavoz de CCOO, del convenio propuesto por Nortec se desprende que "lo único que le interesa" es adquirir "la marca Candemat" de cara a Europa y el resto del mundo, y conseguir de paso "esclavos", en alusión a las condiciones que propone para los trabajadores.

DESPIDOS

En cuanto a la reducción de plantilla, Rodero ha indicado que se contempla el despido de entre 25 y 30 trabajadores de los cerca de 135 con que cuenta en la actualidad, una propuesta que "no es mala", más si se tiene en cuenta la intención de la empresa de "recolocar" a parte de la mano de obra despedida cuando aumente el trabajo.

Esto se hará, ha explicado, porque los empleados de Candemat, dedicada a la fabricación de troquelería para la automoción, es una plantilla "muy especializada" y, además, los trabajadores "llevan muchos años" en la planta camarguesa.

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