Son muchos los establecimientos que necesitan refuerzos para hacer frente a la campaña de Navidad. Las empresas se han puesto ya manos a la obra buscando jóvenes que quieran sacarse un dinero con el que comprar los regalos de Reyes, financiar sus viajes de fin de curso o, simplemente, tener unos ingresos extra para sus necesidades.

Empaquetadores, promotores de ventas, dependientes de refuerzo… serán los más solicitados. Se paga de acuerdo al convenio, aunque algunas empresas pueden mejorar las condiciones según la categoría para la que se realice la contratación. Además, casi el 30% de los contratados terminan incorporándose a la plantilla de la empresa para la que trabajaron, en opinión de Adecco.

Los empleos

Promotores. Ofrecen muestras gratuitas de los productos estrella de las Navidades. Degustaciones de comestibles y muestras de perfumes son las labores más demandadas, pero también hacen campañas las operadoras de telefonía móvil y los propios centros comerciales realizando sorteos.

Manipuladores. Para preparar cestas de Navidad o ensobrar felicitaciones. Sólo se dan en estas fechas, por lo que una vez finalizada la campaña tienen más difícil el permanecer en la empresa.

Empaquetadores. Tiendas de todo tipo necesitan personal que sepa empaquetar los regalos que se pondrán bajo el árbol o junto al belén. Casi todo lo que se compra en estas fechas va envuelto y se necesita atender a los clientes en expositores especiales para acoger la demanda.

Dependientes. Para hacer frente a la gran afluencia de público se suelen habilitar todas las cajas disponibles y se contrata personal para la venta directa. Trabajan sólo durante la campaña de Navidad y las secciones que más demanda reciben son juguetería, electrónica y complementos de vestir, productos clásicos de regalos de Navidad. Tras este periodo navideño es posible que se les pueda volver a contratar para la campaña de rebajas. Más información: Adecco, Randstad y el ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.

Testimonios

Noelia del Coso. Departamento de calidad en una empresa. 25 años.

"Trabajé el año pasado como refuerzo en la sección de videojuegos de un centro comercial. Necesitaba dinero para pagarme el viaje de fin de curso y por eso me decidí a trabajar en esas fechas. En aquel momento me sirvió para lo que quería, pero ya no lo haría más porque ahora tengo un trabajo relacionado con lo que estudié y no me hace falta. Está bien para poder conseguir algo concreto porque en un mes ganas dinero suficiente".

Valeria Otranto. Gestión logística, 19 años.

"Entré el año pasado en mi empresa actual como refuerzo en la cadena de logística para la distribución de productos. A los tres meses me contrató la empresa y desde entonces sigo allí. Comencé en la campaña de Navidad y no me ha ido mal. Aprendí no sólo a hacer lo que querían para la campaña, sino que fui evolucionando e hice más cosas. Al final la empresa me planteó la posibilidad de quedarme trabajando con ellos".