La Guàrdia Urbana podrá intervenir en el ámbito portuario, gracias a un convenio de colaboración que firmarán antes de la próxima Navidad el Ajuntament y la Autoritat Portuària, según avanzaron ayer el alcalde, Jordi Hereu, y el presidente de la entidad marítima, Joaquim Coello.Una de las acciones en las que los cuerpos de seguridad harán más hincapié es la erradicación de la venta ambulante localizada en el interior del recinto portuario. «Todas las actuaciones que contravengan la ordenanza serán prioritarias», aseguró ayer el alcalde, ejemplificando así la proliferación del llamado top manta. Hereu visitó ayer el Port, donde trabajó hace unos años.
Otro de los acuerdos alcanzados permite obtener espacios públicos tras la transformación de tramos del puerto industrial que se dedicarán a usos terciarios, pero no comerciales. Se prevé ganar para la ciudad unas 20 hectáreas entre el Moll de Sant Bertran y el Moll Occidental. Los espacios recuperados serán posibles gracias a edificios de oficinas que ahora son del puerto, unas 10 hectáreas del Port Vell y las seis del futuro Hotel Vela, en proyecto.
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