Tras el desplome, surgieron las dudas. Pero este miércoles, dos días después de que la cubierta desmontable de la plaza de toros de Las Ventas se viniera abajo, el consejero de Presidencia de la Comunidad, Salvador Victoria, descartó "absolutamente" una segunda oportunidad para el proyecto.

"Con la seguridad de los madrileños no vamos a jugar", afirmó en referencia a un posible nuevo intento de la concesionaria del coso, la empresa Taurodelta, para cubrir el espacio y poder así celebrar conciertos en su interior.

De lo que Victoria no habló fue de que el ruedo es sede olímpica para el baloncesto en la candidatura de los Juegos Olímpicos de Madrid 2020.

La Comunidad aclaró después que este fracaso a la hora de poner una techumbre a la arena de la plaza no implicaría un cambio de sede, ya que la concesionaria, Taurodelta, tiene contrato solo hasta 2016.

Por su parte, la empresa ve "prematura" la decisión al no conocerse todavía de forma oficial el derrumbe de la cubierta.

"Después de esa fecha, y si la candidatura de Madrid es aceptada, podría volver a cubrirse. El ‘no’ es a dar una oportunidad más al mismo proyecto, no a volver a intentarlo", explicaba este miércoles un portavoz del Gobierno regional a 20 minutos.es.

Lo que no se explicó es qué tipo de nuevo proyecto se aceptaría para cubrir la Monumental, declarada Bien de Interés Cultural en 1994.

El día que se presentó el plan para cubrir la plaza se explicó que este había sido aprobado porque respetaba las normas dictadas por Patrimonio para la conservación del recinto: que la cúpula fuera desmontable y temporal (las corridas de toros han de realizarse al aire libre), invisible desde fuera y que no afectara a la estructura del espacio.

La cubierta, de 102 metros de diámetro y 160 toneladas de peso, se iba a inaugurar este jueves 31 de enero. Su desplome no provocó daños, pero sí la suspensión de toda la programación de conciertos que se había planeado para el invierno.