Un hombre ha sido condenado a tres años y siete meses de prisión por colocar una cámara de vídeo en el cuarto de baño de mujeres de un supermercado de Xátiva (Valencia), con la que realizó numerosas grabaciones hasta ser descubierto por una cliente que propició su detención.

Según una sentencia del Juzgado de lo Penal número 6 de Valencia, los hechos ocurrieron sobre las 20.00 horas del 15 de diciembre de 2004, cuando el acusado, D.P.S., de nacionalidad ecuatoriana, entró en el aseo de caballeros del supermercado.

Una vez dentro, desplazó una placa de escayola del techo y arrancó una rejilla de ventilación que daba al aseo de señoras, colocando en este lugar una cámara que enfocaba hacia el mismo.

Previamente, había colocado un espejo encima de la papelera del cuarto de baño de mujeres, de forma que al enfocar con la cámara conseguía un mejor plano de los genitales.

Le pilló una cliente del supermercado

Poco después, una mujer entró en el cuarto de baño y escuchó un ruido procedente de la rejilla de ventilación, por lo que miró hacia la misma y observó la luz roja de grabación de la cámara.

Al salir del aseo avisó a su novio, que era agente del Cuerpo Nacional de Policía, y ambos alertaron a los responsables del supermercado.

El acusado, que salió del cuarto de baño con la cámara de vídeo, intentó huir y lesionó al agente y a la mujer que trataban de detenerlo.

En un posterior registro en su domicilio, los agentes encontraron numerosas grabaciones hechas en el mismo aseo durante semanas anteriores, las cuales no consta que hayan sido difundidas o que se realizaran con fines lucrativos, según recoge la sentencia.

La sentencia condena al acusado a una pena de tres años de prisión por un delito continuado contra la intimidad y el derecho a la propia imagen, y a siete meses más por resistencia a un agente de la autoridad.

Además, el procesado deberá pagar una multa de 3.240 euros, e indemnizar al agente con 180 euros y la mujer con 1.025 por las lesiones y el daño moral.