El PSOE ha lanzado una ofensiva legislativa en todos los parlamentos autonómicos para instar al Gobierno a "defender como corresponde los intereses de nuestro país y de la propia UE" en la fase final de aprobación de los Presupuestos comunitarios 2014-2020, que se debatirán en el Consejo Europeo extraordinario de los próximos 7 y 8 de febrero.

Tras su presentación la semana pasada en el Congreso, el PSOE ha remitido a sus grupos parlamentarios de todas las comunidades tres proposiciones no de ley sobre la Política Agraria Común (PAC), los fondos de cohesión o las políticas de empleo, en cuales se recogen los objetivos que, a juicio de los socialistas, "debería marcarse el Gobierno en la negociación". Estas iniciativas serán registradas esta semana en las distintas asambleas para su debate en pleno.

Con esta ofensiva, el PSOE quiere manifestar su rechazo al "pensamiento único que la derecha española y europea intentan imponer, el de la austeridad económica como único camino para salir de la actual crisis económica y financiera".

Así, los socialistas abogan por "apostar de una vez por todas por el crecimiento económico basado en los sectores capaces de garantizar empleo estable y de calidad, un modelo de crecimiento que pueda respaldar el modelo de bienestar europeo, el Modelo Social Europeo y un futuro de prosperidad y justicia social".

Inversiones para el futuro

Desde el PSOE consideran que "el presupuesto de la UE debe ser una herramienta para coordinar y mejorar los esfuerzos nacionales y catalizar desde Europa inversiones orientadas al futuro, en capital humano y educación, a favor de una sociedad basada en el conocimiento, a favor de las infraestructuras, la investigación, la innovación, las pymes y las nuevas tecnologías verdes".

Por esta razón, añaden, "ni la UE en su conjunto, ni mucho menos España, pueden permitirse el lujo de perder el debate sobre el presupuesto de la UE para el periodo 2014-2020 para lograr que estas nuevas perspectivas financieras contribuyan a lograr un fortalecimiento de la gobernanza económica europea y la realización de la estrategia UE-2020 para un crecimiento inteligente, sostenible e integrador".

En el caso de la PAC, las proposiciones no de ley que van a registrar los socialistas en los distintos parlamentos autonómicos exhortan al Gobierno, entre otras cuestiones, a "garantizar el mantenimiento de las actuales asignaciones de la política agraria y "defender el mantenimiento de la propuesta de la Comisión publicada en Junio de 2011 que no debe ser negociada a la baja en ninguna circunstancia".

Asimismo, reclaman "asumir que recortar el presupuesto supondría el principio del fin de la política agraria como política común y abriría la puerta a la renacionalización de la misma", además de "asegurar que el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca refleje el conjunto de las prioridades de la UE, sin poner en peligro la financiación de una nueva política".

Para el PSOE, la PAC debe atender a la "reconversión" del sector (ayudas para desguaces), las paralizaciones temporales (incluso las debidas a causa extraordinaria) y la modernización de la flota; además de impulsar la innovación e investigación en materia de pesca, así como la utilización de artes de pesca más respetuosos con el medio ambiente. Igualmente, cree que debe tener en cuenta la condición de región ultraperiférica de Canarias.

Fondos de cohesión al mismo nivel que ahora

En cuanto a los fondos de cohesión, los socialistas exigen al Gobierno que pelee para que la financiación de los mismos esté "disponible" para todas las regiones y se mantenga al menos al nivel del periodo 2007-13.

También instan al Ejecutivo a que luche por un aumento de la financiación para el empleo, la educación, la formación, la movilidad, la juventud y la inclusión social, así como que se asigne al Fondo Social Europeo el 25 por ciento de la financiación global de la política de cohesión para promover la empleabilidad y la inversión social.

Igualmente se le pide que defienda un aumento de la financiación en favor de la investigación y la innovación, las pymes y la competitividad, y también que defienda la necesidad de introducir en el presupuesto de la UE elementos que tengan en cuenta el esfuerzo realizado por los Estados miembros para cerrar la denominada "brecha tecnológica".