Los siete diputados socialistas en la Diputación de Lleida se han alejado este jueves del líder del PSC, Pere Navarro, al evitar un voto en contra a la declaración de soberanía aprobada el miércoles en el Parlament, en una votación en la que la institución provincial ha secundado la propuesta con los votos de CiU y ERC.

Dos socialistas, el exalcalde de Balaguer Miquel Aguilà y el exalcalde de Tàrrega Joan Amézaga, han levantado el brazo para mostrar su abstención y los otros cinco no han votado.

"Se ha visto que ha habido dos sentidos de voto, porque no votar y abstenerse a efectos prácticos es lo mismo", según ha expresado Aguilà, que ha querido manifestar que habiendo sólo una propuesta encima de la mesa, no la veía clara, a pesar de que, como el PSC, está de acuerdo en el derecho a decidir.

Desde su punto de vista, ha faltado capacidad de diálogo en el Parlament y en ningún caso se puede hablar de ruptura de disciplina de voto porque ésta era una votación del territorio en la que los diputados tienen libertad.

Por su parte, Enric Colom, uno de los socialistas que no han votado, ha remarcado que dentro del PSC hay varias tendencias que difícilmente se pueden recoger en un 'sí', en un 'no' o en una abstención.

Colom ha agregado que los partidos políticos han cometido un grave error: "En un tema que es de país se tiene que sumar y en este caso no se ha tenido o la paciencia o la voluntad suficiente para tener una suma que fuera tan amplia que prosperara por naturaleza propia".

El presidente de la Diputación, Joan Reñé (CiU), ha expresado que le sabe mal que el grupo socialista haya entrado en una "deriva existencial" a la hora de valorar la posibilidad legítima de que los ciudadanos puedan manifestarse en una consulta.

"Los representantes públicos, sobre todo en temas tan trascendentes como estos, entiendo que no han de ejercer situaciones y posibilidades de autismo", ha señalado Reñé.

El presidente de la Diputación ha añadido: "El tren pasa, y cuando pasa el tren se sube o no se sube".