El consejero de Educación, Juan José Mateos, ha reiterado que las nuevas titulaciones que se implanten en el futuro deberán adaptarse al decreto y contar con calidad contrastada al margen de las opiniones de los políticos locales.

Mateos, quien ha acudido este martes a la entrega de premios del Consejo Social de la Universidad de Valladolid, se ha mostrado dispuesto a contar con todos los políticos, especialmente los de las zonas donde se ubican los campus periféricos de las universidades, aunque ha reiterado que a la hora de aceptar propuesta se tendrá en cuenta su adaptación al decreto y su "calidad contrastada".

"Si es así estaré de acuerdo con los políticos, y si no, no", ha recalcado antes de asegurar que, en el caso de Soria, contará con titulaciones nuevas como el resto de campus cuando reúna esas dos condiciones.

Mateos, quien ha puesto de manifiesto que la desaparición de titulaciones es "lo más llamativo" pero "lo menos importante", ha reiterado que aún se trabaja en la elección de las titulaciones que desaparecerán y que será en el marco del próximo Consejo de Universidades, a celebrar el próximo martes, cuando se concrete.

Tras su paso por las Cortes empezarán "entre todos" a tomar decisiones aunque, de antemano, el consejero de Educación ha aclarado que no se trata de "quitar" sino de "hacerlas mejores", lo que constituye el "gran objetivo": la búsqueda de la calidad del sistema universitario.

Por ello, ha ensalzado el hecho de que las cuatro universidades públicas trabajen en este terreno y "hayan puesto sobre la mesa" toda las contingencias sobre titulaciones.

A falta de "matizar y concretar", lo "importante" es que la Comunidad "va a modificar sustancialmente sus titulaciones" y van a ser "mejores, más potentes, más competitivas", mientras que sus universidades serán también mejores tanto en docencia como en investigación.

Por su parte el rector de la Universidad de Valladolid, Marcos Sacristán, ha recordado que precisamente este martes concluye el plazo de presentación de las últimas sugerencias y se ha mostrado convencido de que, entre todos, conseguirán dotar de más "racionalidad" al sistema y adaptarlo a las necesidades del medio.

Sacristán, quien ha mostrado su deseo de que las propuestas sean acogidas, ha recordado que cada universidades persigue sus objetivos pero con la meta compartida de la racionalidad y, apelando a la prudencia y la lealtad, ha rehusado dar más detalles sobre las intenciones de la Universidad de Valladolid a este respecto.