Como el principio de la privatización definió ayer la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid el nuevo reparto sanitario que ha propuesto el Gobierno regional.

Según esta asociación, medio millón de madrileños pasarán a tener un hospital de referencia privado: el hospital de Valdemoro, en construcción, y la Fundación Jiménez Díaz, adquirida por una empresa de capital riesgo.

Protesta vecinalUGT fue más allá y pidió la "retirada inmediata" de esta propuesta, ya que, a su juicio, "incumple totalmente la ley y la Constitución".

El proyecto, según el sindicato, nace con 13 de las 15 áreas saturadas, pues superan los 250.000 habitantes, que es el máximo previsto por la normativa oficial.

Algunos ciudadanos, según UGT, tendrán que desplazarse hasta 90 kilómetros para ir a un centro de especialidades.

La Federación de Asociaciones de Vecinos ha convocado una concentración delante de la Consejería el próximo día 16.